INVESTIGADORES
LEONARDI Maria Soledad
congresos y reuniones científicas
Título:
Dinámica poblacional de Antarctophthirus microchir (Anoplura: Echinophthiriidae) en crías de lobo marino de un pelo en Patagonia, Argentina
Autor/es:
M.S. LEONARDI; B. BERÓN VERA; E.A. CRESPO; J.A. RAGA; S. AMEGHINO; D.G. VALES; F.J. AZNAR
Lugar:
Puerto Madryn
Reunión:
Jornada; VI Jornadas Nacionales de Ciencias del Mar; 2006
Resumen:
En este estudio analizamos por primera vez la dinámica poblacional del piojo Antarctophthirus microchir en el lobo marino de un pelo, Otaria flavescens. Este sistema es particularmente interesante porque el comportamiento anfibio del hospedador impone serias constricciones en el ciclo vital de estos ectoparásitos. Estudios previos han mostrado que los piojos no pueden reproducirse en el agua porque sus huevos no sobreviven en dicho medio. El estudio se realizó en dos sectores de cría de lobos en el apostadero de Punta León, Chubut, durante 2005-2006. Se obtuvieron datos sobre el sexo, la edad, el peso y el número de piojos de 94 crías de 0 a 32 días de vida. Los piojos se clasificaron en los tres estados ninfales (N1, N2 y N3) y adultos. El 85% de las crías estaba parasitada. Una regresión logística reveló que el modelo más parsimonioso para explicar la probabilidad de infección incluía sólo la edad de la cría, independientemente del año y del sector y de sus interacciones. Un modelo lineal mixto mostró que sólo la edad de la cría y el sector era predoctores significativos del número de piojos en crías infectadas. Se observaron cambios predecibles en la estructura poblacional con la edad de la cría independientemente del año y el sector. Hubo un alto número de adultos en crías de 0-10 días y un descenso muy señalado en crías de 20-30 días. Las N1 aparecieron sólo en crías >10 días; su número creció en crías de hasta 20 días y después disminuyó bruscamente. Las N2 y N3 aparecieron escasamente en crías de 0-20 días y su número se incrementó a partir del día 20. Nuestra interpretación de estos resultados es la siguiente: las hembras de O. flavescens contagiarían a las crías recién nacidas con N2, N3 y principalmente adultos. En las crías, los adultos se reproducirían inmediatamente, y los huevos eclosionarían a partir de los primeros 10 días originando N1. Las mudas sucesivas aumentarían el número de N2 y N3 hacia los 30 días, pero no habría tiempo suficiente para que se alcanzase el estado adulto. Puesto que las crías comienzan las inmersiones a partir de los 30 días, el ciclo estaría constreñido a un único evento reproductivo; de ahí que el número de N1 también descienda después del pico reproductivo inicial.