INVESTIGADORES
MALLOL Anahi Diana
congresos y reuniones científicas
Título:
La literatura y las artes plásticas: espectador y lector en la postvanguardia
Autor/es:
MALLOL, ANAHI DIANA
Lugar:
Vaquerìas, Còrdoba
Reunión:
Jornada; V Jornadas de Intercambio Académico en el Area de la Docencia e Investigación de la Literatura Latinoamericana.; 2011
Institución organizadora:
Katatay: Red de Estudios Latinoamericanos.
Resumen:
Para algunos teóricos del arte el pop no es sino un avatar del realismo así como el hiperrealismo es un avatar del pop. Ambos contemporáneos, en los 60 americanos, del minimalismo escultórico y de las etapas finales del expresionismo abstracto a lo Pollock. Así, en nuestros años noventa, lo que Belleza y Felicidad pone en escena, lo que el grupo nucleado en torno a Tsé=Tsé, a la Escuela Alógena y la Estación Alógena, proponen (llevar el lenguaje más allá de sus límites, sonoros, sintácticos, semánticos, una experimentación, lingüística en los poemas, que busca llevar un poco más allá, si cabe, la poética iniciada por los neobarrocos y los neobarrosos) busca también su integración o su choque con otras modalidades: la performance, por ejemplo, la ejecución en vivo. Ahí donde lo neobarroco se cruza con lo pop: en la presentación de Plebella, con las luces apagadas y bastante humo, ná kar Elliff-ce y Gabriela Béjerman, recitando sus poemas junto con la ejecución de percusión y cuerdas, para pasar después a la aparición de Fernanda Laguna, o alguno de sus alter ego, vestida como en los cincuenta, para hacer también una performance. Porque caída la pregnancia del símbolo como modelo de lectura de "lo poético", allá cuando el poema se proponía como transacción entre lo ideal y lo real, como posibilidad de verdad, belleza y libertad, lo que se construye, en sus configuraciones transgenéricas, sus performances, sus mezclas típicamente pop de lenguajes, es ese lugar imposible en la Argentina de los 90, ese lugar fantástico, airiano, donde lo plebeyo se confunde con lo bello y lo que surge no es sólo el kitsch, como podría en buena ley pensarse, sino algo así como la culminación de lo efímero.