INVESTIGADORES
BERTI Agustin Federico
capítulos de libros
Título:
La agenda política transhumana
Autor/es:
AGUSTÍN BERTI
Libro:
Spoilers del presente. Ver series para ser de nuestra época
Editorial:
Editorial de la UNC
Referencias:
Lugar: Córdoba; Año: 2021; p. 47 - 62
Resumen:
Tras el asesinato de George Floyd a manos de la policía de Minneapolis y las sucesivas protestas y represiones sucedidas en todo el territorio a lo largo del año 2020, "El nacimiento de una nación" parece no haber perdido su actualidad. Me interesa discutir aquí la íntima relación política que une el individualismo radical antiestatal y el racismo encarnados por los encapuchados del Ku Klux Klan con las ficciones de superhéroes (que además han monopolizado la última década del cine como entretenimiento). El ámbito obvio para estos contrastes es el de la ficción política (como House of Cards o Boss), la legal (The Good Fight o Seven seconds), o el de las ficciones distópicas y las ucronías (El cuento de la criada, La conjura contra América, El hombre en el Castillo). La superheroicidad es, por lo general, un género menor, que a lo sumo se interesa por el problema de la omnipotencia o por explorar las psiquis torturadas de héroes y antihéroes (como en la saga de las Batman de Nolan, el Joker de Todd Phillips o el Logan de James Mangold), pero del cual la política y el imperialismo se sustraen.Si la televisión era la caja boba, por oposición al ámbito cinematográfico, con las franquicias de superhéroes (la exitosa Marvel y la fallida, pero por momentos más interesante, DC) esa relación hoy se invierte. La forma serial, con su consumo diferido y privado habilitado por el video-a-demanda, es hoy el ámbito de la ficción exigente masiva mientras que la sala oscura se presta a la espectacularización argumental y conceptualmente bastante trivial y apta para todo público. Así la serialidad aparece como uno de los pocos lugares capaces de disputar la hegemonía de dos exaltaciones, la del vigilantismo y la del destino manifiesto de los EE.UU.: Watchmen lo hace con una compleja ucronía; The Boys con desparpajo cínico. Mi hipótesis es que ambas abordan de modo crítico la agenda política coincidente del transhumanismo, la alt-right y el aceleracionismo de derecha, agenda que, no casualmente, coincide en varios aspectos con la del supremacismo blanco.