INVESTIGADORES
BACHILLER Santiago
artículos
Título:
Introducción al dossier Políticas públicas y personas en situación de calle
Autor/es:
BACHILLER, SANTIAGO
Revista:
Ciudadanías. Revista de Políticas Sociales Urbanas
Editorial:
UNTREF
Referencias:
Año: 2022 vol. 10 p. 1 - 17
Resumen:
Durante los últimos años, distintas organizaciones denunciaron el incremento de la población en situación de calle en los más diversos países. Así, la European Federation of National Organisations Working (FEANTSA, 2017) sostiene que, con excepción de Finlandia, el “sinhogarismo” se intensificó en toda la Unión Europea en las últimas décadas. En Argentina, desde mediados de los 1990´, la cantidad de personas residiendo en las calles ha adquirido cada vez mayor relevancia. Ante cada crisis, la situación de calle se visibiliza y los medios de comunicación señalan el aumento de personas y familias pernoctando en la vía pública. Lamentablemente, todo parece indicar que la pandemia de COVID 19 no será la excepción a esta regla; si bien debemos tomar distancia de las cifras disponibles, las mismas apuntan en una misma dirección: en La Plata se calcula que la población en calle aumentó entre un 20 y un 40% entre el 2020 y el 2021 ; el Censo realizado en junio del 2021 por el Gobierno de la Ciudad de Buenos registró un aumento del 48% respecto del 2020 ; en Rosario, las cifras se dispararon entre un 20 y un 30% ; en Córdoba las filas del sinhogarismo se habrían engrosado un 20% ; etc.Para generar políticas públicas adecuadas, precisamos contar con información de calidad sobre la magnitud, características y evolución del fenómeno de calle. Argentina adolece de tales estadísticas, déficit que representa un enorme desafío político. La situación de calle es un problema federal que trasciende el ámbito de las metrópolis, expresándose también en las ciudades intermedias de las distintas provincias. Sin embargo, a diferencia ya no de las naciones que conforman el “norte global”, sino de países limítrofes como Chile o Brasil, Argentina no posee un diagnóstico ni una política nacional sobre el fenómeno de calle. El escenario es aún más complejo, ya que tampoco contamos con una red de organizaciones de la sociedad civil (en adelante OSC) y/o de investigadores con capacidad de aportar una perspectiva panorámica y federal sobre esta problemática social. En nuestro país, el nivel de intervención con personas en situación de calle (en adelante PSC) es muy dispar. La mayoría de las localidades no cuenta con ningún tipo de dispositivo para estas poblaciones; ciertas ciudades disponen de diferentes modalidades de asistencia básica (alimentación, indumentaria y, a veces, un techo; es decir, un dispositivo de alojamiento precario, lo cual no equivale a un hogar), por lo general bajo responsabilidad de alguna iglesia (con o sin apoyo estatal). Unas pocas metrópolis han logrado un mayor nivel de desarrollo de las políticas de atención a las PSC, aunque tal afirmación no presupone la consolidación de una red de atención: la articulación de los diversos programas y dispositivos suele ser deficiente, el tránsito de una lógica asistencialista a otra de promoción de derechos es materia pendiente, etc. Un problema crucial es que, incluso en las ciudades donde el Estado local generó información sobre el tema, la misma es de difícil acceso, no se encuentra sistematizada, y suele ser objeto de impugnación por parte de las OSC. En materia de investigación, es mucho lo que nos falta por recorrer; la situación de calle es un campo que prácticamente no ha sido explorado por las ciencias sociales de Argentina. Contamos con algunas (pocas) tesis de grado o posgrado, por lo general localizadas en la ciudad de Buenos Aires, pero no con proyectos de investigación sostenidos en el tiempo. En la mayoría de las urbes no se han generado estudios, tampoco se han abordado temas relevantes como la prevención frente a la situación de calle, el rol de género y la situación particular de las mujeres, la articulación entre las infancias y los adultos en situación de calle, la incidencia de los egresos de “instituciones totales” (cómo las cárceles o los centros de minoridad) en la conformación del fenómeno, etc. La falta de datos constituye una modalidad de violencia institucional, no sólo porque la generación de estadísticas e informes es una obligación incumplida por los distintos niveles de Estado, sino también porque no garantizar su disponibilidad y acceso público contribuye a la invisibilización del fenómeno. Por consiguiente, entendemos al presente dossier como un esfuerzo por visibilizar un problema social acuciante. En tal sentido, solicitamos artículos que caractericen, desde una perspectiva crítica, a las políticas públicas para PSC. Los textos que compondrán el dossier podrían guiarse por interrogantes como los siguientes: ¿cómo las distintas agencias estatales (más las OSC y/o los investigadores) denominan y explican al fenómeno?; ¿cómo caracterizan su evolución reciente?; ¿qué acciones realizan en pos de solucionar la situación de calle?; ¿qué principios o filosofía de intervención podemos detectar en las prácticas cotidianas del personal estatal y/o de las OSC con PSC?; dichas intervenciones, ¿tienen la flexibilidad necesaria para adaptarse a un fenómeno tan complejo y diverso?; ¿cómo dichas políticas y programas contemplan dimensiones claves, como el trabajo, el género, la salud, la vivienda, la educación, o el ocio y la cultura?; ¿qué políticas se adoptaron para prevenir el incremento del fenómeno?; ¿qué medidas se han tomado en materia de egresos de instituciones totales? En lo que respecta a la coordinación de las políticas públicas: ¿cómo se articula la acción estatal en los niveles nacional, provincial y municipal?; ¿cuál es el grado de coordinación entre los distintas ministerios y secretarías?; ¿en qué medida el Estado logra establecer directrices y regular las prácticas cotidianas de los dispositivos conveniados con OSC? En materia de normativa, ¿cómo fue modificándose y qué establece la normativa vigente sobre la materia? Focalizando la atención en los gestores de dispositivos y programas, a continuación citamos otras posibles preguntas guías: ¿cómo evalúan el nivel de éxito de las intervenciones?; ¿cómo variaron los presupuestos y la cantidad de personal asignado en los distintos servicios?; ¿cuáles son las condiciones laborales de dicho personal?; etc. Finalmente, es de resaltar el impacto que ha tenido la pandemia de COVID 19 en el incremento de las tasas de pobreza, en el desempleo y la precariedad laboral, así como en la calidad de vida y las rutinas cotidianas de las personas. En tal sentido, los artículos podrían girar en torno a cómo las políticas públicas en general, y las intervenciones cotidianas en dispositivos y programas en particular, fueron modificadas en función de las medidas de aislamiento y cuidado forzadas por la pandemia. Para la elaboración del dossier, convocamos a una serie de expertos internacionales, con quienes nos une la voluntad de generar una red de investigadores/as sobre situación de calle, a pensar en los desafíos que deben afrontar las políticas públicas ligadas con el sinhogarismo. A su vez, invitamos a la presentación de artículos libres, con publicación sujeta a la evaluación de pares, que promuevan la implementación de políticas públicas para PSC acordes con una perspectiva de derechos.