INEO   27310
INSTITUTO DE FILOSOFIA "EZEQUIEL DE OLASO"
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Materialismos más allá de la finitud: Deleuze y Meillassoux
Autor/es:
ANTONELLI, M. S.
Lugar:
San Martín, Pcia. de Buenos Aires
Reunión:
Congreso; Primer Congreso Internacional de Ciencias Humanas. Humanidades entre Pasado y Futuro; 2019
Institución organizadora:
UNSAM
Resumen:
En esta comunicación queremos explorar dos modos de pensar el materialismo en el horizonte filosófico posterior a la muerte del hombre. Tanto Gilles Deleuze como Quentin Meillassoux comparten un abordaje de lo real que pretende escapar del idealismo en sus diversas vertientes, ya sea mediante la ontología materialista maquínica, intensiva y vitalista en el caso de Deleuze, como a través del materialismo especulativo en el de Meillassoux. La obra del segundo se enrola en el Realismo Especulativo, movimiento que goza de notable vitalidad en el panorama filosófico contemporáneo; la obra deleuziana es previa y opera de referente para Meillassoux, quien lo reconoce como un gran metafísico pero lo critica porque, a su juicio, queda encerrado en el círculo correlacional que caracteriza el pensamiento moderno. Según nuestra lectura, ambos coinciden en el proyecto de elaborar una ontología materialista no correlacional pero difieren en los rasgos que le asignan, así como en la posibilidad de la filosofía de acceder al absoluto. El libro de Meillassoux Más allá de la finitud. Ensayo sobre la necesidad de la contingencia sienta las bases del materialismo especulativo, a saber: una filosofía que acceda a una verdad eterna al margen de las variaciones psicológicas, históricas, lingüísticas de nuestra relación con el mundo. El autor pretende rehabilitar la conexión del pensamiento con lo absoluto comprendido en su sentido etimológico como lo desligado, lo separado del pensamiento, lo no relativo a nosotros. Su proyecto consiste en pensar el ser con independencia del pensamiento, sin que ello suponga una contradicción pragmática; dicho de otro modo, pensar el ser fuera de nosotros, con prescindencia del sujeto. Por su parte, Deleuze ha señalado también un más allá de la finitud en el Apéndice al Foucault, donde desarrolla la hipótesis según la cual la finitud es la marca de la formación histórica del siglo XIX, dado que las fuerzas en el hombre entraron en relación con las fuerzas del afuera (la vida, el trabajo, el lenguaje) y dieron lugar a la forma-Hombre. Deleuze detecta signos de una mutación en las relaciones de fuerzas, que darán lugar a una forma aún desconocida, la de un ?finito-ilimitado?, que designa situaciones en las cuales un número finito de componentes ofrece una diversidad casi ilimitada de combinaciones. En suma, Deleuze se desplaza hacia un horizonte post-finito, pero no lo hace desde la especulación, como Meillassoux, sino situando las distintas formas en la historia y analizando las mutaciones en el campo de las relaciones de fuerzas. El más-allá-de-la-finitud no vendrá por un giro especulativo en filosofía, sino por una mutación histórica que incluye el pensamiento filosófico, pero no depende de él.