Implementación de tecnologías ambientales en la vivienda social

GRACIELA VIEGAS; JODRA, JUAN IGNACIO; CARLOS DISCOLI; GUSTAVO SAN JUAN

Florencio Varela

Congreso; IV Congreso Nacional de Ciencia y Tecnología Ambiental; 2019

Programa de Estudios en Ambiente y Territorio. Instituto de Ciencias Sociales y Administración. Universidad Arturo Jaureche

De acuerdo con estimaciones del INDEC, la población Argentina alcanzó en 2018 44,5 millones de habitantes y 13,3 millones de hogares. En cuanto a la vivienda, actualmente el déficit habitacional asciende a 4 millones, de los cuales 1,5 corresponden al déficit cuantitativo y el resto al déficit cualitativo. Ante esta situación el Estado ha desarrollado una serie de programas nacionales para paliar el déficit, recurriendo a la construcción y mejoramiento de viviendas. La mayor parte de la demanda es atendida en forma cuantitativa, orientándose hacia la construcción de vivienda destinada a la población con necesidades básicas o de alta precariedad, generalmente situadas en enclaves sub-urbanos. En este marco, apoyados por los desarrollos nacionales y regionales, las normativas vigentes y en función de antecedentes locales, se diseñaron y construyeron cuatro viviendas sociales bioclimáticas con implementación de tecnología ambiental en la ciudad de Tapalqué a partir de la interacción de cuatro organismos del Estado (de ciencia y técnica, de gestión pública, de normalización y municipal). Este trabajo tiene por objetivo evaluar la mejora ambiental proporcionada a una vivienda del conjunto mencionado, específicamente en cuanto a: comportamiento térmico; comportamiento energético; y aceptación social de la vivienda por parte de sus usuarios.La metodología plantea una auditoría ambiental, que consiste en realizar un registro cuantitativo de los parámetros climáticos y la temperatura, humedad relativa interior e infiltraciones de aire, a través de adquisidores de datos. Y un registro cualitativo de la percepción ambiental y confort a través de una entrevista a los usuarios. Los resultados muestran que las viviendas tienen un muy buen comportamiento térmico-energético registrado en forma objetiva y percibida subjetivamente por los usuarios. Y además el uso de la vivienda con la implementación de las tecnologías ambientales es sencillo y lógico.