INVESTIGADORES
CICCIOLI Patricia Lucia
congresos y reuniones científicas
Título:
ANÁLISIS SEDIMENTOLÓGICO DE GEOFORMAS LINEALES EN EL ZANJÓN DE APOCANGO, BOLSÓN DE FIAMBALÁ, CATAMARCA
Autor/es:
FERNANDEZ MOLINA, D.; CICCIOLI, P.L.
Reunión:
Jornada; V Jornadas de Comunicaciones del IGEBA; 2022
Institución organizadora:
IGEBA
Resumen:
El Bolsón de Fiambalá, es un valle intermontano limitado por el Sistema de Famatina al oeste, las Sierras Pampeanas al este y la Puna al norte, caracterizado por importantes depósitos eólicos, principalmente en el centro y este y, en menor medida, fluvio-aluviales. Presenta condiciones ambientales áridas a semiáridas y una dirección preferencial de vientos del oeste y sudoeste con velocidades de hasta 69 km/h. En la presente contribución se exhiben resultados de un estudio sedimentológico sobre unas geoformas lineales particulares a las que definimos como TARs (Transverse Aeolian Ridges), desarrolladas en la parte media del valle, en el Zanjón de Apocango. Su caracterización resulta relevante ya que, en dicho sector del valle, actualmente, las acumulaciones eólicas arenosas no son usuales. La metodología de trabajo consistió en la realización de un mapeo preliminar de las geoformas; tareas de campo de descripción y muestreo de la cubierta superficial, levantamiento de una sección artificial y relevamientos fotográficos generales y de detalle mediante un drone. En el laboratorio se realizaron los estudios granulométricos consistentes en la medición concalibre de las gravas, tamizado de la fracción más fina y cálculo de los principales parámetros. También se determinó la composición de las gravas y de la fracción arenosa mediante la observación de preparados al microscopio petrográfico realizando un conteo de aproximadamente 300 granos por muestra. Se reconocieron cinco geoformas lineales simétricas a levemente asimétricas hacia el este con una altura promedio de entre 50 a 60 cm y un ancho de 8,50 a 9 m. Se disponen como cuerpos muy aislados con crestas rectas de dirección aproximada E-O (82°-261°). La cobertura superficial analizada exhibe una distribución de frecuencias bimodal con una moda gravosa en guija gruesa (-4,5φ) y otra en arena fina (2,5φ), una media en gránulo (-1,89φ) y una muy pobre selección (σ: 2,73). Los clastos tamaño grava son subredondeados, de esfericidad moderada, con formas laminar, prolada, discoidal, esférico-prolado y esférico-laminar dominantes. De acuerdo con su composición, se clasifican como clasto-ortogravas líticas donde predominan las gravas de origen sedimentario y volcánico ácido. A partir del análisis de las modas detríticas de la fracción arenosa se obtuvo que los líticos son el componente dominante (45,84%) seguido por los feldespatos (27,64%) y por último el cuarzo (26,52%) por lo que las muestras se clasificaron según la propuesta de Folk et al. (1970) como litoarenitas feldespáticas. Dado el alto porcentaje de fragmentos líticos se planteó un diagrama hijo (Lm+Lpa, Lv y Ls) y resultó que los líticos volcánicos predominan (75,35%) siendo los de composición ácida los más representados (84,01%). En un perfil transversal de una de las geoformas que comprende desde la cubierta externa hasta los 50 cm de profundidad se identificaron de base a techo las siguientes unidades: 1) arena fina a limosa con gravilla dispersa y estructura masiva, 2) arena guijarrosa con estructura masiva a levemente laminada, 3) arena fina a limosa masiva y 4) cobertura gravo-arenosa. De acuerdo con las características composicionales obtenidas se puede interpretar que el aporte principal del material arenoso como gravoso proviene del sector occidental del valle (Sistema de Famatina). Esto concuerda con las direcciones preferenciales de los vientos y con el área fuente del sistema aluvial del Apocango, responsable de movilizar el material gravoso.