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Animales criados a altas tasas de crecimiento cuando son sometidos a restricciones tróficas pierden peso más rápido y soportan peor esas restricciones que animales que crecieron a bajas tasas de crecimiento. Este trade-off entre la tasa de crecimiento y el aprovechamiento del alimento ante una disponibilidad trófica restringida ha sido observado, aunque no en forma sistemática en ensayos de laboratorio en Pomacea canaliculata (Lamarck, 1822). Este trabajo se enfoca en la adecuación rápida a nuevas condiciones de disponibilidad de alimento mediante plasticidad fenotípica. Caracoles provenientes de una misma puesta fueron criados individualmente en acuarios de 2 litros a 25°C. El agua fue renovada semanalmente y se agregó carbonato de calcio a saturación. Treinta caracoles (diez por tratamiento) fueron sometidos a una primera fase de crecimiento (1FC) bajo tasas de alimentación de un 80, 50 o 30% respectivamente. La cantidad de alimento (g) asignada a cada tratamiento fue calculada mediante una ecuación generada previamente que relaciona el largo (LT) con la ingestión de lechuga diaria (ad-libitum). Los caracoles median inicialmente 8±0,62mm y se los crió bajo uno de estos tres tratamientos hasta alcanzar los 20mm. Al alcanzar esta talla se los sometió a una segunda fase de crecimiento restringido (2FC) en la que se redujo la tasa de alimentación a un 10% durante 4 semanas a todos los tratamientos. Semanalmente se registró su largo y peso. Las tasas de crecimiento que se obtuvieron durante la primera fase del experimento (1FC) fueron de 3,41, 2,12 y 1,41mm/semana para los tratamientos de 80, 50 y 30% respectivamente. El cambio en el peso durante la segunda fase de crecimiento (2FC) no mostró diferencias entre los tratamientos (Brown-Forsythe, p=0,086) mientras que el cambio en el largo si mostró una disminución lineal (ANOVA; Contraste polinomial, p