Trichinella spiralis en Chaetophractus villosus y sus factores de riesgo

KIN M.S.; RANDAZO V.; FORT M.C.; CASANAVE E.B.

La Plata, Argentina

Congreso; III Congreso Panamericano de Zoonosis - VIII Congreso Argentino de Zoonosis; 2014

Facultad de Ciencias Médicas de la UNLP y Asociación Argentina de Zoonosis

INTRODUCCIÓN La triquinosis es una zoonosis de distribución cosmopolita. En el hombre el consumo de carne infectada con larvas de Trichinella puede variar de una presentación asintomática a un cuadro clínico fulminante y mortal dependiendo del número de larvas ingeridas. El diagnóstico de triquina en reses de porcinos y equinos es una práctica habitual, pero en animales silvestres la enfermedad prácticamente no es tenida en cuenta. En la última década se han detectado brotes de triquina en humanos debido al consumo de carne silvestre (puma, jabalí) sin su correspondiente análisis. El objetivo de este estudio fue analizar en Chaetophractus villosus (Mammalia, Dasypodidae) la presencia de larvas de triquina y los factores de riesgo asociados. MATERIALES Y MÉTODOS Se analizaron entre los años 2007 al 2010, 150 C. villosus (70 machos y 80 hembras), provenientes de la provincia de La Pampa. Para la detección de larvas de triquina se utilizó la técnica de digestión artificial, siguiendo el procedimiento estándar y para su determinación específica se realizó PCR. Los músculos analizados fueron: diafragma, masetero y base de la lengua. Se utilizó un estadístico con un 95% de nivel de confianza y un valor de p ≤ 0.05 el que fue considerado significativo. Los niveles de asociación de las variables evaluadas fueron analizados por medio del test de Chi-cuadrado (c2), software (Epi. Info 6.0.4). RESULTADOS Se detectó la presencia de larvas de Trichinella en el 25.3% (38/150; IC95%:18.4-32.2) de los C. villosus estudiados (20 machos y 18 hembras). Mediante PCR se identificó a la especie como T. spiralis. El porcentaje de infección fue similar en ambos sexos (p=0.394). No se encontraron diferencias de porcentaje teniendo en cuenta la edad de los armadillos (p=0.667), ni la presencia de cerdos (p=0.367), ovinos (p=0.614) y aves de corral (p=0.312) pero sí la presencia de tambo (p=0.016) en los sitios de captura. CONCLUSIÓN Los C. villosus se encuentran más expuestos a contraer triquina, particularmente en aquellos sitios donde hay tambos. Los humanos que ingieran su carne poco cocida, se encontrarían en riesgo de contraer la enfermedad por lo que nuestros resultados aportan información valiosa con respecto a la epidemiología de esta zoonosis.