Sartre: el delincuente como encarnación del Mal

SERGIO TONKONOFF

CABA

Exposición; Seminario Grupo de Estudios sobre Estructuralismo y Postestructuralismo; 2015

Instituto de Investigaciones Gino Germani /UBA

En su libro San Genet, Sartre brinda una precisa descripción del pensar habitual respecto del criminal. Allí muestra como a la hora de dar cuenta de las transgresiones a la ley, el sentido moral de los individuos honrados es violentamente esencialista. El portador típico ideal de este sentido común se define por su apego a los dictados del hábito, por la obediencia mecánica a lo que existe: la autoridad de las prohibiciones no es para él (o ella) que la autoridad de la costumbre. Las jerarquías sociales y morales existentes son su referencia central cuando habla de Bien: el Bien es lo que es, posee el peso abrumador e indiscutible de lo evidente. El mal en cambio, es lo que no debería existir y sin embargo sucede. Los malvados deben pagar por actualizar el mal.