Adsorción in vitro de aflatoxina B1 y fumonisina B1 por medio de bentonita sódica y carbón activado.

MONGE M.P.,; MAGNOLI A.P; BERGESIO M.V.; TANCREDI N.; MAGNOLI C.E.,; CHIACCHIERA S.M.

Río Cuarto

Congreso; VII Congreso Latinoamericano de Micotoxicología; 2013

Orientacoón Micología, Universidad Nacional de Río Cuarto

El riesgo toxicológico asociado con las micotoxinas se ha convertido en un aspecto central del problema de la invasión fúngica de los cultivos o de los granos almacenados. La presencia de niveles significativos de toxinas fúngicas en los alimentos puede ocurrir bajo condiciones relativamente benignas, donde el crecimiento de los hongos es limitado, y en muchos casos hasta difícilmente detectable a simple vista. Las aflatoxinas (AFs) y las fumonisinas (FBs), son consideradas potentes toxinas que afectan la salud de las aves provocando daños agudos ó crónicos. Actualmente, los esfuerzos para reducir la micotoxicosis en las aves se han dirigido a la incorporación de materiales adsorbentes de micotoxinas como aditivos en los alimentos balanceados. Estas sustancias secuestran las micotoxinas y son excretadas sin que se absorban en el intestino y puedan causar daño en el animal. La eficacia de esta práctica ha sido eficientemente comprobada para el caso de las AFs. Diferentes adsorbentes han demostrado variable efectividad para la adsorción de las toxinas de Fusarium. Estudiar la habilidad de una bentonita sódica para adsorber aflatoxina B1 (AFB1) y fumonisina B1 (FB1). Evaluar la influencia de la FB1 sobre la capacidad de la bentonita sódica (NaB) para adsorber AFB1. Estudiar la capacidad de dos carbones activados (CAs) para adsorber FB1. Investigar la reversibilidad del proceso de adsorción. Los estudios de adsorción in vitro realizados muestran que NaB fue efectiva en la adsorción de AFB1 y FB1 cuando se encuentran solas. Este adsorbente presenta afinidad y capacidad de adsorción comparables para ambas toxinas (ßmedio: (0,10± 0,031) x 106 M-1 y ɼmax, medio: 0,50 ± 0,01 mol g-1). El estudio de adsorción competitiva, para una relación de FB1 (200ppm) /AFB1 (1ppm) que simula la abundancia natural de las toxinas, muestra una reducción de la captación de AFB1 como consecuencia de la competencia de FB1 por los sitios en la superficie del adsorbente. Los carbones activados presentan semejante capacidad de adsorción (0,11 ± 0,01 mol g-1) y gran afinidad por FB1, siendo esta última dependiente del pH del medio. Todos los complejos formados por los tres adsorbentes son irreversibles. La NaB adsorbe AFB1 y FB1. Esta última toxina afecta la capacidad de la NaB para adsorber AFB1. Los estudios in vitro mostraron que ambos CAs son capaces de adsorber FB1. El complejo formado con los tres adsorbentes utilizados es irreversible. Estos resultados y la co-ocurrencia de AFs y FBs sugieren la necesidad de formular mezclas de estos adsorbentes para la prevención de las aflatoxicosis crónicas.