Revisando la inmigración temprana a la Argentina. El caso vasco.

MARCELINO IRIANNI

Catamarca

Jornada; Jornadas Interescuelas departamento de Historia; 2019

Universidad Nacional de Catamarca

Transcurridomedio siglo desde los primeros acercamientos a la temática sobreinmigración a la Argentina, seguimos revisando cortes temporales yespaciales, marcos teóricos, ajustando conceptos.Losdocumentos disponibles y la perdurabilidad del impacto de losprincipales grupos migratorios -italianos y españoles-, fuerondecisivos para que los estudios anclaran en lo que más tarde sedenominaría etapa clásica de la inmigración (1880-1930).Prontamente, aquella dejó traslucir el debilitamiento de su pisotemporal. Los inmigrantes habían comenzado a llegar cuatro décadasantes. Frente al masivo flujo inmigrante tardío desde 1880, se optópor catalogar como temprano al período 1840-1880. Lainmigración temprana apareja elementos distintivos que la enriquecenen forma notable. Si los documentos para recuperarla son parcos,principalmente por un Estado aún caracterizado por un registroescueto, no podemos ocultar que se trata de extranjeros quecompartieron el territorio con indígenas y nativos, además de serpartícipes en la construcción de espacios nuevos de frontera. Laposibilidad de una mirada holísticadeese período, frecuentemente atomizado por las plumas de losespecialistas (criollos, gauchos, inmigrantes e indios), es una ideainsignia de nuestros tiempos. 1840/1880es una etapa extraordinaria de la inmigración en la Argentina, unamaqueta ideal para repensar el espacio, los sujetos históricos quelo transitaron, las coyunturas que incidieron en ellos, los procesosque dejaron cimientos y huellas que moldearían la etapa siguiente.Se trata de un ejercicio analítico comparable a la Edad Mediaeuropea o la etapa oscura griega. Momentos del devenir históricomarginados historiográficamente con la presunción de que allí, encomparación con etapas posteriores, no había sucedido nadaimportante. Hoy sabemos que contenían las raíces de procesos que sepresentan luego con claridad. Utilizando el caso vasco como testigo-aunque no es el único grupo llegado entonces-, observaremosaspectos sustanciales que diferencian ambas etapas.Losespacios nuevos eran atractivos, incómodos y peligrosos. Tierrasy gente en marcado desequilibrio, no eran un aliciente menor.Ganancias vertiginosas, como una majada en pocos años, eran la gotaque desbordaba los vasos de cientos de pueblos irlandeses, vascos yfranceses. La frontera bonaerense era un borde del mundo que mutabasu paisaje socio económico, abrazado débilmente por un Estado quetomaba forma. Un espacio extraordinario que catapultaba a gruposrecién llegados y desplazaba o incluía con claras desventajas aotros.