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Las condiciones más favorables para el desarrollo y propagación de Aedes aegypti se encuentran en ambientes urbanizados, mientras que los ambientes silvestres suelen ser adversos para su proliferación. La dinámica de este mosquito en la ciudad de Buenos Aires implica expansiones que se inician en la zona periférica (octubre) y alcanzan el borde del río De La Plata (marzo-abril) cuando sus abundancias llegan a ser máximas. El objetivo de este trabajo fue evaluar si la urbanización precaria y reciente sobre hábitats silvestres ribereños permite la presencia del vector durante la temporada de su mayor actividad. El estudio se realizó en un barrio rodeado por un ambiente silvestre ribereño y un depósito de chatarra (Rodrigo Bueno en el borde de la Reserva Ecológica de Costanera Sur) y otro barrio alejado del río e inmerso en la matriz urbana (Las Flores, Vicente López). Se compararon las actividades de oviposición mediante la utilización de ovitrampas durante la última semana de marzo y la primera de abril, y se evaluó la presencia de criaderos. De las 50 ovitrampas revisadas cada dos días se observó que las medianas de los porcentajes de positividad (2%) y la proporción de ovitrampas totales positivas (X2= 1,7; p > 0,05) no difirieron significativamente entre los dos barrios. Los porcentajes de criaderos no difirieron significativamente entre Las Flores (18%) y Rodrigo Bueno (12,8%) (X2= 0,4; p > 0,05) y más de la mitad de los criaderos en Rodrigo Bueno se hallaron en el depósito de chatarra. Los resultados sugieren que Aedes aegypti en la temporada más favorable puede proliferar en las áreas consideradas adversas y sería propiciado por la presencia de chatarra.

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