INVESTIGADORES
CHABAY Paola Andrea
congresos y reuniones científicas
Título:
Rol de la polarización de macrófagos en el microambiente de linfoma de Hodgkin (LH) pediátrico
Autor/es:
JIMENEZ O; COHEN, M; DE MATTEO E; MAGALHÃES BARROS, M; GARCIA LOMBARDI, M; NIEDOBITEK G; PRECIADO MV; PAOLA ANDREA CHABAY
Lugar:
Mar del Plata
Reunión:
Congreso; XXIII Congreso Argentino de Hematología; 2017
Institución organizadora:
Sociedad Argentina de Hematología
Resumen:
La presencia de macrófagos en el microambiente en diferentes tipos de tumores tiene un impacto negativo en la evolución de los pacientes, y el Linfomas de Hodgkin (LH) no es una excepción. Este hecho se debe en parte a la polarización de los macrófagos, la cual está descripta en tumores como de tipo protumoral, hacia un perfil M2, que genera un microambiente disfuncional, a diferencia de la M1 que genera un ambiente antitumoral. En LH de adultos, se demostró un perfil de polarización M2 asociado a mal pronóstico, independientemente de la presencia del virus de Epstein Barr (EBV). En nuestro país se demostró una elevada asociación de EBV en niños menores de 10 años en linfomas B, entre ellos el LH. ObjetivoEvaluar la participación de los macrófagos y su polarización en la patogénesis del LH en relación a la presencia de EBV y determinar si modifica la composición de determinados factores del microambiente.MétodosSe analizaron 45 pacientes con LH, entre 2-18 años de edad (mediana: 9 años). Sobre microarrays de biopsias de tejido (TMAs) se realizó inmunohistoquímica (IHQ) para los marcadores CD8, CD4, FOXP3 y GRZB, doble inmunohistoquímica para CD68 como marcador de macrófagos acompañado de PSTAT1 (perfil M1) y CMAF (perfil M2). Además se realizó hibridación in situ (ISH) para la detección de EBERs. Se caracterizó el microambiente mediante el recuento de poblaciones celulares expresando sus resultados como células+/mm2 para cada uno de los marcadores analizados. ResultadosSe observó que de 45 pacientes analizados, 34 ( 76%) tenían el perfil M1, de los cuales 22 pacientes eran del subtipo celularidad mixta (CM) , 3 depleción de linfocitos (DL) , 5 esclerosis nodular (EN) , 2 ricos en linfocitos ( HCRL) , 2 predominio linfocito nodular (PLN), en tanto que 7( 15%) mostraron un perfil M2 , siendo 4 CM y 3 EN. Sólo 4 (9%) mostraron similar recuento de las poblaciones M1 y M2 . En cuanto a la asociación con EBV se observó que 33 pacientes (75%) eran EBV + y 11 EBV ? (25%). No se encontraron diferencias en el perfil de polarización con respecto a la presencia de EBV, dado que el perfil M1 prevaleció tanto en casos EBV+ y EBV- (p>0,05, test exacto de Fisher). Asimismo, no se encontraron diferencias en las medias de los recuentos de poblaciones M1 y M2 entre los casos EBV+ y EBV- (p>0,05, test Mann Whitney). El análisis de correlaciones entre los recuentos de los marcadores para M1 y M2 con las poblaciones CD4, CD8, Foxp3 y GrB no reveló correlaciones significativas, excepto para M1 con Foxp3 en los casos EBV+ (r=0.373, p=0.036, test correlación Spearman) y para M1 con GrB en los casos EBV- (r=0.905 p=0.005). ConclusionesSe evidenció una prevalencia del perfil de polarización M1, a diferencia del perfil M2 observado en diferentes tipos de tumores y LH de adultos. Este perfil de polarización fue independiente de la presencia de EBV, en contraposición a lo previamente descripto en LH pediátricos de Brasil, donde se describió un mayor recuento de los marcadores de población M1 sólo en los casos EBV+, y una prevalencia del perfil M2 en los casos negativos. En los casos EBV+ la polarización a M1 estaría contrarrestada por un perfil regulador dado por el mayor recuento de células Foxp3+, cuyo reclutamiento se ha demostrado en LH EBV+. Por el contrario, en LH EBV- este perfil el perfil M1 fue acompañado por un microambiente citotóxico, probablemente para ejercer un efecto antitumoral.