INVESTIGADORES
ESPINOSA Marcela Alcira
congresos y reuniones científicas
Título:
LAS GRAVAS DEL RÍO DE LA PLATA: LAS PLAYAS HOLOCENAS DE BELLA VISTA, URUGUAY
Autor/es:
ISLA, FEDERICO I.; ESPINOSA MARCELA A.
Lugar:
Paraná
Reunión:
Congreso; XVII Reunión Argentina de Sedimentología y VIII Congreso Latinoamericano de Sedimentología; 2021
Institución organizadora:
AAS | Asociación Argentina de Sedimentología
Resumen:
El Río de la Plata es una ría con una costa tipo planicie costera dominada por arenas finas a muy finas en el sur, y una costa tectónica en el norte dominada por arenas finas a gruesas. Si bien en las cabeceras dominan los procesos fluviales con influencia de los brazos distributarios del Paraná, en el sector más externo las playas tienen mayor acción de las olas que aumentan considerablemente en ocasión de tormentas provenientes del SE. La estadística de olas está corroborada por la deriva hacia el oeste responsable de las espigas que caracterizan las desembocaduras de los estuarios (Solís Grande, Solís Chico). En esta costa norte uruguaya existe un tramo con playas compuestas de gravas, tramo Bella Vista-Las Flores, cuya descripción y composición no había sido analizada con detalle hasta el momento. La playa de Bella Vista posee dos bermas compuestos predominantemente de gravas, el de tormenta ha sido parcialmente cubierto por arenas eólicas. La playa de Las Flores en cambio, se compone de un único berma en el que se segregan gravas hacia el tope y arenas hacia los sectores más bajos. Las gravas del berma superior de Bella Vista son más finas (3-6 cm de diámetro mayor), en cambio las que componen los bermas mareales son más grandes, de 6 a 15 cm, sin diferencias entre ambas playas. De acuerdo al diagrama de Zingg, dominan las gravas obladas y tabulares desgastadas por acción de olas. La estabilidad de estos depósitos en tiempos históricos, y su posición por debajo de arenas de barrera medanosa indican que se habrían formado durante el highstand del Holoceno medio, y derivados por las olas a partir de depósitos sumergidos del Complejo Sierra de las Animas (Sanchez Bettuci et al., 2009).