Estudio de movimientos de Oligoryzomys flavescens, reservorio de hantavirus, y sus posibles implicancias en la dispersión de hantavirus

BENÍTEZ AM; BUSCH M; GOROSITO I

Buenos Aires

Simposio; XIX Simposio Internacional sobre enfermedades desatendidas; 2019

Fundación Mundo Sano

Estudio de movimientos de Oligoryzomys flavescens, reservorio de hantavirus, y sus posibles implicancias en la dispersión de hantavirus.Gorosito I.L. 1,2, Benítez A.M. 1 , Busch M. 1,2.Departamento de Ecología, Genética y Evolución, FCEN-UBA1, Instituto de Ecología, Genética y Evolución de Buenos Aires, CONICET 2.Contacto: Gorosito I.L., iree26@gmail.com, teléfono: 4576-3300.El Síndrome Pulmonar por Hantavirus es una enfermedad viral que conlleva una alta letalidad y se transmite al ser humano, principalmente, a través de la inhalación de aerosoles liberados en las heces y orina de roedores infectados, o por contacto directo con estos. Los reservorios de hantavirus en Argentina son roedores de la familia Cricetidae, subfamilia Sigmodontinae. En particular, los casos humanos en la región Central del país están asociados al genotipo Lechiguanas, cuyo reservorio es Oligoryzomys flavescens, y afectan en gran medida a trabajadores rurales. En agroecosistemas de dicha región, O. flavescens habita ambientes estables con alta cobertura vegetal, tales como bordes de campos de cultivo y terraplenes de vías. El objetivo de este trabajo fue caracterizar en estos ambientes el espacio utilizado en forma individual y habitual por O. flavescens para satisfacer sus necesidades, llamado rango de acción (RA) y determinar posibles implicancias en la ocurrencia de focos de infección.Entre 2014 y 2016, se realizaron 11 muestreos bimestrales de captura, marcado y recaptura de roedores sobre tres terraplenes de vías en agroecosistemas de la localidad de Diego Gaynor, Partido de Exaltación de la Cruz, Provincia de Buenos Aires. En cada muestreo los individuos atrapados fueron marcados con caravanas numeradas y devueltos en el lugar de captura, permitiendo un seguimiento longitudinal. Se evaluó la estabilidad del RA (es decir, si es fijo o móvil a lo largo de la vida del individuo) de O. flavescens a partir de las distancias entre sucesivos puntos de captura de cada individuo que fue capturado más de una vez (distancia que se aproxima al RA), y su relación con respecto al tiempo transcurrido entre ambos eventos (desde días hasta varios meses). Mediante modelos lineales, no se encontró una relación significativa entre los desplazamientos individuales y el tiempo transcurrido, indicando que O. flavescens tiende a establecer su RA en un único lugar durante su vida. Por otro lado, se observaron dos individuos que realizaron desplazamientos inusualmente grandes (mayores a la media más tres desvíos estándar de la distribución global de distancias entre recapturas), tras los cuales retornaron a su área habitual en pocos días. Tales eventos muestran la ocurrencia de excursiones del roedor fuera de su RA.El hecho de que O. flavescens mantenga su RA fijo daría lugar a focos de infección localizados de hantavirus. Al mismo tiempo, las excursiones ocasionales podrían transportar el virus distancias mayores que las usuales, originando nuevos focos de infección locales, alejados del área donde usualmente se mueve el roedor originalmente infectado. Por lo tanto, el riesgo para el humano no sólo estaría donde se registra la presencia habitual de O. flavescens, sino también a mayores distancias donde un roedor infectado realizará una excursión y dejará el ambiente contaminado con el hantavirus. Esta información debe ser tenida en cuenta al elaborar modelos epidemiológicos orientados a estudiar la dinámica de la infección en poblaciones de roedores y su relación con el riesgo para humanos.