IGEBA   23946
INSTITUTO DE GEOCIENCIAS BASICAS, APLICADAS Y AMBIENTALES DE BUENOS AIRES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Protección de costas y zonificación de la erosión en la localidad de Santa Clara del Mar, partido de Mar Chiquita.
Autor/es:
BUNICONTRO, MARÍA PAULA
Lugar:
Villa Carlos Paz, Provincia de Córdoba
Reunión:
Simposio; 10º Simposio de Geología Aplicada a la Ingeniería y al Ambiente; 2012
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Geología Aplicada a la Ingeniería
Resumen:
La zona de estudio comprende el área costera de la localidad de Santa Clara del Mar, ubicada en el sector sudeste de la provincia de Buenos Aires, en el partido de Mar Chiquita. Dicha localidad balnearia dista 370 km de la Capital Federal y 17 km de la ciudad de Mar del Plata. Durante las últimas décadas, el rápido crecimiento de las localidades costeras no ha considerado las limitaciones que el medio físico impone para su desarrollo. La urbanización y el avance del turismo sobre la costa de Buenos Aires han llevado a una explotación intensiva de los recursos naturales sin tener en cuenta las consecuencias. El entorno ambiental y natural en el que se desarrolló el área costera de estudio ha sufrido modificaciones a lo largo de los últimos años de acuerdo a causas naturales y a cambios introducidos por la actividad antropogénica y el avance del frente urbano. Esto ha afectado, directa o indirectamente, las tasas de aporte de sedimentos al sector costero, y como resultado se han incrementado los procesos de erosión de las playas y el retroceso de los acantilados de manera notable. El objetivo del presente trabajo consiste en analizar la morfodinámica y el retroceso costero entre los años 1958 y 1975 cuando la costa mostraba condiciones naturales, y la estabilización de la línea de costa y las variaciones morfológicas registradas como consecuencia de la implementación de estructuras de defensa costera, entre los años 1958 y 2009. Este análisis tiene como finalidad obtener tasas de retroceso de línea de costa y delimitar zonas con mayor o menor riego de erosión. Otros puntos a abordar son la caracterización de la morfología original y evolución costera entre dichos años y la caracterización de la morfología de la playa actual y el perfil de la costa. El análisis del retroceso de la línea de costa se llevó a cabo a través de la observación de fotografías aéreas en escala 1:20.000 del Departamento de Geodesia de la Provincia de Buenos Aires de los años 1958, 1975 y 1986 y de la imagen satelital Google Earth 2009. Para ello se midieron las distancias perpendiculares al pie del acantilado en seis puntos equidistantes entre sí. Dichos valores fueron graficados en función del tiempo y aproximados a una curva de regresión lineal a partir de la cual se calcularon las velocidades de retroceso costero para cada sector. A su vez, en cada punto de observación se midieron anchos de playa para estimar tasas de acumulación de sedimentos. Para el análisis de los cambios geomorfológicos más relevantes se ha realizado un estudio comparativo entre dichos años considerando además las modificaciones producto del avance de la urbanización. Con el objetivo de caracterizar la morfología de la playa actual y el perfil de la costa se han relevado cuatro perfiles topográficos transversales utilizando una estación total. Los primeros tres se ubicaron sobre la costa de Santa Clara del Mar, específicamente entre los distintos espigones de defensa para analizar su efecto sobre la configuración de la playa. El cuarto perfil se localizó sobre la costa de Camet Norte, inmediatamente al norte de Santa Clara del Mar, con el fin de analizar la dinámica costera en este sector ya que se encuentra bajo el efecto erosivo de los espigones antes mencionados, y con un desarrollo mayor del campo de dunas colgadas. Geomorfológicamente, el paisaje de esta zona es poligenético y se encuentra modelado en mayor medida por los procesos eólico, fluvial y marino. El proceso fluvial se evidencia principalmente por la presencia de ríos de régimen permanente y hábito meandriforme, cuyos valles corren perpendiculares a la costa. Los acantilados son activos y tienen una altura promedio de entre 4 y 6 m. Están labrados sobre niveles limo-arenosos con intercalaciones de calcretes pertenecientes a los sedimentos Pampeanos y Post-Pampeanos del Pleistoceno tardío-Holoceno. Respecto a esto, se distinguen dos modelos de costa acantilada: uno al sur de Santa Clara del Mar y otro al norte. El modelo sur posee acantilados que pueden alcanzar los 8 m de altura, con un amplio desarrollo de plataforma de abrasión de hasta 40 m, importante exposición al oleaje en estadios de alta marea y escaso desarrollo de rampas mixtas de poca altura. El modelo norte está representado por acantilados de poca altura (3 a 4 m), presencia de rampas eólicas de aproximadamente 1 m, sin desarrollo de plataformas de abrasión marina y con una alta exposición al oleaje sólo en estadios de mareas extraordinarias. Se distinguen plataformas de abrasión en forma irregular e intermitente a lo largo de la costa, con anchos que pueden alcanzar los 50 m mientras que las playas están compuestas por sedimentos arenosos con anchos que varían desde 20 m hasta 60 m. Actualmente, el campo de dunas colgado se encuentra muy degradado con dunas parcialmente vegetadas y estabilizadas que apenas alcanzan los 8 a 10 m de ancho.   A partir del análisis geomorfológico evolutivo puede observarse que las principales alteraciones sobre la dinámica natural del sistema costero en esta zona están dadas por el avance de la urbanización durante las últimas décadas y el desarrollo de esta localidad como centro turístico. Se destaca un diseño reticulado de la urbanización perpendicular a la costa con un fuerte avance de la superficie urbana desde la entrada de Santa Clara del Mar hacia el norte entre 1958 y 1975. Durante este período, también se llevó a cabo la canalización del arroyo Los Patos, el cual divide Santa Clara de la localidad de Camet Norte. Los principales cambios a partir de la década de 1950 se asocian a la destrucción casi total del campo de dunas colgado original para la construcción de viviendas, caminos costeros y balnearios, y la implementación progresiva de estructuras de defensa costera tales como espigones en T y J y paredones verticales (seawalls). Estas modificaciones han alterado notablemente la dinámica costera original: disminuyendo el aporte de sedimentos arenosos hacia la playa por cambios en el aporte eólico (degradación y estabilización del campo de dunas colgado), marino (por disminución de aporte de arena de los acantilados debido a la construcción de paredones verticales) y fluvial (desviación y canalización de arroyos) entre otras variaciones locales.                 En el análisis de la morfodinámica de la playa actual los resultados demuestran que el ancho de playa está influenciado por la presencia de los espigones, los cuales retienen mayor cantidad de sedimentos hacia el sur de acuerdo a la dirección de la deriva litoral. Es por ello que se distinguen mayores velocidades en el aumento del ancho de playa en aquellos sectores directamente ubicados bajo el radio de influencia de los espigones, que oscila entre 100 y 150 m. La playa ha alcanzado anchos entre 70 y 130 m lo que representa valores muy por encima de los 20 m originales que se registraban para esta área costera. La tasa de avance promedio para los puntos analizados entre 1958 y 2009 es de 0,90 m/año, con máximos de 1,7 m/año al sur de los espigones. En los sectores ubicados deriva arriba de los espigones se registra un incremento del ancho de playa mucho más lento con tasas de 0,54 m/año y con anchos máximos de 50 m, que si bien no representan erosión indican una efectividad parcial de dichas estructuras.                 Como resultado del análisis de los gráficos de retroceso costero pueden distinguirse dos períodos: uno, entre los años 1958 y 1975, donde el retroceso costero es natural, y un segundo período, entre 1975 y 2009, con menor retroceso debido a la presencia de estructuras de defensa. Durante los primeros años se registra un período erosivo importante cuya magnitud aumenta de sur a norte desde 1,7 m/año hasta 5,8 m/año. La zona de mayor erosión se extiende desde la calle La Habana hasta la Avenida Del Paso, alcanzando en límite con Camet Norte un retroceso de 100 m en 17 años mientras que el sector central de la costa analizada presenta tasas de 2,35 m/año. Con posterioridad al año 1975, las tasas de retroceso costero obtenidas no presentan cambios significativos, manteniéndose aproximadamente constantes en el tiempo (0,25 m/año). En algunos sectores las tasas disminuyen ligeramente producto del relleno y la reconstrucción del área costera para el trazado definitivo de la Avenida Costanera. Las tasas de retroceso entre los años 1975 y 2009 disminuyen notablemente (entre 0,09 y 0,97 m/año) producto de la instalación de las medidas de defensa. En base a las tasas de retroceso obtenidas para la localidad de Santa Clara del Mar entre los años 1958 y 1975 se zonifica la erosión costera en tres zonas: baja, moderada y alta erosión. La zona de baja erosión (sector sur) se caracteriza por poseer velocidades de retroceso < 2 m/año. Se encuentra protegida por paredones verticales y se ubica entre la Av. del Arroyo y Lastres. La zona de erosión moderada (sector central) corresponde a un sector costero amplio con retrocesos entre 2 y 3 m/año ubicado entre las calles Lastres y La Habana. Dicho sector se encuentra protegido por los primeros espigones y paredones verticales. Finalmente, la zona de mayor erosión (sector norte), situada al norte de la calle La Habana, presenta velocidades de retroceso ˃ 3 m/año y se encuentra asociada a la degradación casi total del campo de dunas colgadas. Dentro de las conclusiones principales de este trabajo puede mencionarse que como resultado del análisis geomorfológico evolutivo y la comparación de la morfología costera en los últimos 50 años se ha logrado diferenciar entre un período de retroceso natural de la costa previo al desarrollo urbanístico y un período de estabilización de la línea de costa asociado a la intervención humana. Las tasas de retroceso natural han permitido zonificar la costa de acuerdo al riesgo de erosión para lograr mayor conocimiento de la dinámica original del sistema y focalizar en el mantenimiento de las estructuras de defensa en aquellas zonas más vulnerables. Los resultados obtenidos demuestran la efectividad local de las medidas de defensa implementadas ya que ha sido posible  estabilizar de la línea de costa, minimizando el retroceso, y ha aumentado en algunos sectores la playa - un recurso costero tan importante en esta zona. Sin embargo, resulta necesario mencionar que dicha estabilización de la costa y retención local de sedimentos por parte de los espigones en Santa Clara del Mar produce una subsaturación de la corriente de deriva. Esto traslada la problemática del proceso erosivo deriva arriba, afectando directamente en este caso, a la localidad de Camet Norte que presenta una tasa de retroceso continuo de 2,15 m/año y que ha perdido más de 110 m de frente costero desde 1958.