IGEBA   23946
INSTITUTO DE GEOCIENCIAS BASICAS, APLICADAS Y AMBIENTALES DE BUENOS AIRES
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
ANÁLISIS DE LA INFLUENCIA DE FACTORES TECTÓNICOS Y CLIMÁTICOS EN LA DINÁMICA DE LA FAJA PLEGADA Y CORRIDA Y LA CUENCA DE ANTEPAÍS ASOCIADA EN LOS ANDES NORPATAGÓNICOS
Autor/es:
GARCÍA MORABITO, EZEQUIEL; OLAIZOLA, EZEQUIEL R.; FALCO, JUAN IGNACIO; BECHIS, FLORENCIA; THOMPSON, STUART; GALETTO, ANTONELA; SANTONJA, CAMILA; SURIANO, JULIETA; MIZERIT, IGNACIO; YAGUPSKY, DANIEL; BALLESTEROS PRADA, JOHN MARIO; ENCINAS, ALFONSO; ORIOLO, SEBASTIAN; LITVAK, VANESA D.; FERNANDEZ PAZ, LUCIA; VALENCIA, VICTOR A.; RAMOS, VICTOR A.
Lugar:
Puerto Madryn
Reunión:
Congreso; XXI Congreso Geológico Argentino; 2022
Resumen:
La evolución tectónica de los Andes Norpatagónicos registra una etapa inicial de acortamiento y levantamiento orogénico desde el Cretácico al Paleógeno, seguido por una fase extensional acotada en- tre el Eoceno y el Mioceno temprano (Bechis et al. 2014, Echaurren et al. 2016). Una segunda etapa de acortamiento tuvo lugar durante el Mioceno, evidenciada por la propagación frontal de una faja plegada y corrida (García Morabito et al. 2021). El objetivo general de este trabajo es evaluar la in uencia relativa de factores tectónicos y climáticos durante el acortamiento neógeno. En particular, analizamos la dinámica de la faja plegada y corrida y su cuenca de antepaís asociada, para evaluar la velocidad relativa de los procesos super ciales (erosión y sedimentación) y profundos (deformación) durante la evolución de este sistema acoplado. Para ello llevamos a cabo un estudio interdisciplinario, combinando datos estructurales, termocronológicos, sedimentológicos y geocronológicos.La zona de estudio comprende los sectores central y oriental de los Andes Norpatagónicos entre los 41º y 42ºS. El cuerpo principal de la cordillera a estas latitudes está conformado por una faja plegada y corrida de piel gruesa, y se caracteriza por una importante exhumación de bloques de basamento conformados por rocas metamór cas paleozoicas y rocas plutónicas mesozoicas a cenozoicas. El acortamiento mínimo esti- mado para el orógeno en este segmento es relativamente bajo, variando entre 12 y 15% (Orts et al. 2015).Se realizaron análisis de termocronología de trazas de  sión en apatita (AFT) y circones (ZFT), con el  n de analizar la historia de enfriamiento de las rocas en su recorrido hacia la super cie durante el proceso de exhumación de los bloques de basamento. Se analizaron muestras de granitoides del Batolito Patagónico Subcordillerano (Jur. Inf.), del Batolito Patagónico Cordillerano (Jur. Medio a Sup.) y de la Fm. Coluco (Mioceno). Los resultados obtenidos muestran una gran heterogeneidad, con edades de enfriamien- to comprendidas entre el Cretácico y el Mioceno, lo que indica un patrón de exhumación complejo. En particular, las edades de AFT y ZFT de los plutones jurásicos indican una importante etapa de enfriamiento entre el Cretácico Temprano tardío y el Paleoceno temprano, probablemente asociada a la etapa inicial de acortamiento andino. Este evento también se encuentra registrado por edades de enfriamiento en el área del antepaís (Savignano et al. 2016, Genge et al. 2021) y por edades Th-U-Pb en monacitas del basamento paleozoico (Oriolo et al. 2019). Por otra parte, las edades de enfriamiento más jóvenes corresponden al Mioceno. En el caso de los plutones miocenos, estas edades estarían asociadas a su cristalización, ya que presentan evidencias de emplazamiento somero. El resto de las edades más jóvenes están asociadas a los sectores topográ camente más bajos, y están ubicadas en el bloque colgante de las fallas inversas principa- les, por lo que podrían estar relacionadas a la última fase de acortamiento neógena. Estas muestras revelan edades de enfriamiento de AFT del Mioceno medio a tardío (14-8 Ma). Interpretamos que la distribución espacial y altitudinal de las edades de enfriamiento y su relación con las fallas inversas principales eviden- cian una exhumación moderada y diferencial controlada por la actividad de las estructuras en el Neógeno.Los depósitos sinorogénicos asociados a la faja plegada y corrida en este sector forman parte del relleno de la cuenca de Ñirihuau, que se extiende a lo largo del borde oriental de la cordillera, y de la cuenca de El Bolsón, ubicada en una posición intermontana. Recientes datos geocronológicos, estructurales y sedimentológicos indican que estas cuencas fueron contemporáneas y podrían haber estado conectadas en algún momento de su evolución. Ambas muestran una evolución tecto-sedimentaria multifásica similar, registrando una etapa extensional comprendida entre el Oligoceno y el Mioceno temprano, seguida por una etapa sinorogénica durante el Mioceno medio a tardío (Bechis et al. 2014, Ramos et al. 2015, Butler et al. 2020, Santonja et al. 2021, García Morabito et al. 2021). La sedimentación sinorogénica habría iniciado en algún momento después de los 16 a 15 Ma, y las evidencias de deformación contemporánea con la sedimen- tación en ambas cuencas se registran entre los 13 y los 10 Ma, mientras que no hay registro de depositación sinorogénica con posterioridad a los 10 Ma. Para la etapa sinorogénica, los depocentros registran importantes espesores, y altas tasas de sedimentación.Los datos termocronológicos analizados en este trabajo permiten estimar que la primera etapa de compresión andina en el Cretácico al Paleógeno fue un evento signi cativo y de alcance regional, y com- plementan las escasas y limitadas evidencias de campo de la deformación asociada a esta etapa. Nuestros datos también registran un pulso de acortamiento relativamente corto en una angosta faja plegada y co- rrida durante el Mioceno medio a tardío (~16/15 a 8 Ma). Se registra una baja tasa de propagación frontal de corrimientos, con importantes desplazamientos focalizados en unas pocas fallas inversas que levantan bloques de basamento, favoreciendo una exhumación moderada y diferencial de su bloque colgante. En la cuenca de antepaís asociada se registran altas tasas de sedimentación y una escasa migración lateral de los depocentros principales. Estas características son compatibles con un sistema donde la tasa de los procesos super ciales (erosión y sedimentación) es relativamente alta con respeto a la tasa de deformación (Simpson 2006), posiblemente bajo un sistema de e ciencia erosiva relativamente estable, típico de climas húmedos (Yagupsky et al. 2014). Una aceleración en las tasas de erosión a partir del Mioceno tardío (~7 Ma), relacionada con las primeras glaciaciones registradas en Patagonia, habría modi cado la dinámica de la faja plegada y corrida, produciendo una marcada desaceleración de los procesos de deformación y subsidencia en el frente orogénico (Thomson et al. 2010, García Morabito et al. 2021).