INVESTIGADORES
SEGURA Diego Fernando
congresos y reuniones científicas
Título:
Comportamiento de forrajeo en el parasitoide Diachasmimorpha longicaudata (Ashmead) Hymenoptera: Braconidae): importancia de la experiencia previa
Autor/es:
DIEGO F. SEGURA
Lugar:
S.M. del Tucumán, Tucumán
Reunión:
Congreso; VI Congreso Argentino de Entomología; 2005
Resumen:
Estudios previos sobre las claves visuales que utiliza D. longicaudata en la búsqueda de hospedadores mostraron que las hembras no poseen preferencia innata por colores. No obstante, las hembras pueden desarrollar preferencia por un color particular, si en eventos previos de forrajeo encuentran larvas asociadas a un hábitat de ese color. En el presente trabajo intenté profundizar en este proceso (conocido como aprendizaje asociativo) y estudiar sus posibles ventajas. Se trabajó siempre con dos colores modelo: amarillo y rojo. Se hicieron tres experimentos. En el primero se estudió el efecto sobre el aprendizaje del número de eventos previos de forrajeo sobre un color dado. Estudios previos mostraron que tres eventos de forrajeo fueron suficientes para que una proporción significativamente mayor de hembras visitara el color en el que habían sido entrenadas. En nuestro experimento, las hembras fueron entrenadas durante 1, 3, 5 ó 7 días consecutivos en amarillo. Al día siguiente, se les ofreció a las hembras dos colores: amarillo y rojo. Los resultados mostraron que a medida que aumentan los días de entrenamiento, aumenta la proporción de hembras que responden al mismo. En el segundo experimento se estudió si la preferencia de las hembras se mantiene cuando aumenta el intervalo de tiempo desde el último entrenamiento. Para esto se entrenaron hembras durante tres días en amarillo y se dejaron pasar 1, 3, 5 o 7 días. Luego se analizó cómo respondieron las hembras a la prueba de elección. Los resultados mostraron que a medida que pasan los días desde el último entrenamiento, la cantidad de hembras que responden al mismo disminuye. En el tercer experimento se estudió qué ventaja tiene para la hembra, en términos de éxito reproductivo, establecer este tipo de asociación entre hospedadores y color del sustrato. Se entrenaron dos grupos de hembras, uno sobre amarillo y otro sobre rojo. Luego se le ofreció a cada hembra dos sustratos: uno amarillo con 50 larvas y uno rojo sin larvas. Se encontró que las hembras que fueron entrenadas en amarillo dejan en promedio un mayor número de descendientes, señalando una importante recompensa en términos de su éxito reproductivo. Un comportamiento de este tipo le permite a las hembras ahorrar tiempo en la búsqueda del hospedador y esto les otorga una ventaja sobre hembras que desarrollaron preferencia por un color que dejó de estar asociado a la presencia de larvas.