En cuerpo y alma. De la dialéctica (ilustrada) entre sí mismo y naturaleza y sus consecuencias en el ámbito de lo político

GAMBAROTTA, EMILIANO MATÍAS

La Plata

Jornada; VII Jornadas de Investigación en Filosofía; 2008

Departamento de Filosofía, Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación, Universidad Nacional de La Plata

            La intención de este trabajo es indagar la tensa lógica relacional que tiene lugar en la específica forma socio-histórica en que los seres humanos se vinculan con la naturaleza, dominándola para distanciarse de ella. Naturaleza que no es sólo aquella externa a los seres humanos, sino también la interna a éstos, la relación que se establece con el propio cuerpo, con sus pasiones, impulsos y deseos. Siendo esta problemática uno de los motivos centrales de aquello que Horkheimer y Adorno denominaron la “dialéctica de la ilustración”; por lo que serán esas reflexiones las que centralmente nos brindarán el telón de fondo sobre el cual percibiremos nuestro objeto de estudio. Allí encontramos una densa manera de abordar cómo en el proceso por el cual los seres humanos dominan la naturaleza (externa e interna) y, a través de dicha dominación, afirman su sí mismo, dotándose de un nombre propio frente a la anónima naturaleza; se produce también una forma de autodominación que lleva a la eliminación de lo cualitativamente distinto, devorado por un proceso de abstracción que borra las particularidades, reduciendo a los seres humanos a simples seres genéricos. Los cuales, carentes de toda rasgo diferenciador, son reabsorbidos por la (segunda) naturaleza, de la que pretendían escapar.             Esta lógica relacional, de apariencia paradójica, entraña la escisión entre un sí mismo (cada vez más abstracto y, por ende, vaciado de todo contenido) y un cuerpo (en tanto naturaleza interna a los seres humanos); hallándose allí una de las formas más profundas que adopta la separación entre sujeto y objeto, al percibir a una dimensión del propio sujeto como una cosa más en el mundo de las cosas. A esto cabe agregar que la afirmación del sí mismo rompe con la naturaleza y su “cerrado” movimiento cíclico, permitiendo así la emergencia de lo particular, generando la “abertura” para lo cualitativamente distinto, lo nuevo. Pero, a un mismo tiempo, ese proceso se funda en una dominación de la naturaleza, en la autodominación de las propias pasiones e impulsos, que persigue la eliminación de lo cualitativamente distinto, en un intento por “cerrar” toda “abertura” a lo nuevo, a la modificación del ciclo que reproduce a la (segunda) naturaleza en su forma actual. Todo lo cual entraña la introducción, en nuestro análisis, de una dimensión atinente a lo político, en tanto referente a la singular lógica relacional a través de la cual se ordena el entramado social, a los mecanismos que reproducen dicho orden así como a las posibilidades de su transformación.