La política del tiempo: Palabra y cuerpo como experiencias de temporalidad en las luchas por la vivienda en la Ciudad de Buenos Aires

MANZANO, VIRGINIA

Córdoba

Otro; X Reunión de Antropología del Mercosur; 2013

Universidad Nacional de Córdoba

Los debates sobre la relación entre tiempo y política se renovaron intensamente en antropología debido a los aportes de Michael Herzfeld y Partha Chatrerjee. En esta ponencia recupero términos propuestos por estos autores para analizar experiencias de temporalidad anudadas tensamente en las luchas por la vivienda en la Ciudad de Buenos Aires así como la relación de éstas con las formas que toma la vida política en sus imbricaciones y articulaciones contextuales con modos de organización estatal. Durante mi trabajo de campo con un movimiento social que agrupa a ocho cooperativas para la compra de suelo urbano y construcción de vivienda en el marco de una política estatal, advertí experiencias de temporalidad disimiles encarnadas en los sujetos. Los fundadores y militantes activos de ese movimiento se reconocían íntimamente en una imaginación histórica que conectaba linealmente pasado, presente y futuro, ponderando estrategias acumulativas de poder tendientes a incidir sobre la organización estatal, como la conversión de logros de la lucha colectiva en leyes. La palabra, tanto oral como escrita, detentaba centralidad, empleándose para establecer memorias, genealogías y reconocimientos, compromisos militantes (talleres de reflexión, documentos internos), y diálogos con autoridades gubernamentales (petitorios, audiencias, etc.). Tiempo histórico y palabra contribuían a instituir legitimidades en términos de construcciones de clase social y ciudadanía como es la denuncia a la segregación clasista del espacio urbano y la proclamación del derecho de acceso a la ciudad. A la par, quienes integraban las cooperativas en procura de una vivienda parecían anclar sus experiencias en otra modalidad de organizar el tiempo, que siguiendo a Herzfeld podemos denominar tempo, para designar a un movimiento de producción y uso de objetos. De ahí, la desestimación de la palabra y la centralidad que cobraba el movimiento corporal ordenado en el trabajo semanal de las unidades domésticas para la construcción de las viviendas. Esta experiencia temporal anclada en el cuerpo se legitimaba antes que en elaboraciones de clase social y ciudadanía, en lo que Chatrerjee define como sociedad política, es decir, en relaciones con el Estado a través de políticas orientadas a gobernar series poblacionales.