INVESTIGADORES
RICHAUD Maria Cristina
congresos y reuniones científicas
Título:
Relaciones entre la percepción que tienen los niños de los estilos de relación y de la empatía de los padres y la conducta prosocial en la niñez media y tardía
Autor/es:
RICHAUD, M. C.
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; XI Reunión Nacional y I Encuentro Internacional de la Asociación Argentina de Ciencias del Comportamiento; 2009
Institución organizadora:
AACC
Resumen:
Relaciones entre la percepción que tienen los niños de los estilos de relación y de la empatía de los padres y la conducta prosocial en la niñez media y tardía w        Debido a su importancia, en los últimos años se ha incrementado el interés por la investigación sobre el desarrollo prosocial en la infancia y la adolescencia, especialmente como un factor de protección moderador de la agresividad y como una disposición que favorece la adaptación y las habilidades sociales w        La conducta prosocial, el compartir y ayudar a los otros, de la misma manera que el altruismo son conceptos que se superponen y que tienen raíces sociales y evolutivas en común. La bibliografía acerca de las relaciones entre la empatía y la conducta prosocial sugiere que los dos conceptos están íntimamente relacionados y están influidos en gran medida por experiencias tempranas de relación interpersonal. Algunos autores encontraron que la empatía predecía la conducta prosocial en la niñez media. Estudios posteriores han concluido que los individuos empáticos son menos agresivos por su sensibilidad emocional y su capacidad para comprender las consecuencias negativas potenciales para el mismo y los otros que se pueden derivar de la agresión; por tanto la empatía aparece negativamente relacionada con la conducta agresiva y positivamente relacionada con la conducta prosocial w        La empatía involucra no sólo la experiencia afectiva del estado emocional real o inferido de otra persona, sino además algún reconocimiento y comprensión mínimos del estado emocional de otro. w        La empatía es la habilidad de participar de los sentimientos o ideas de otros, sentirse mal cuando el otro está triste y bien cuando siente alegría. Para desarrollar empatía un niño debe poder sentir apego por otra persona y tener cuidado si esa persona es amenazante. w        El desarrollo de la empatía y la correspondiente culpa y vergüenza cuando uno hiere o no ayuda a otro asegura la conducta prosocial y el altruismo, aún y preferentemente cuando no existen premios ni castigos externos. w        Se han utilizado diferentes enfoques en la medición de la empatía. Algunos han priorizado sus aspectos emocionales, otros sus aspectos cognitivos y finalmente se ha desarrollado un modelo integrativo que abarca ambos enfoques. Dentro de este último la empatía ha sido definida por Davis como un constructo multidimensional w        Davis (1983) incluyó tanto los componentes cognitivos como emocionales y afirmó que la empatía puede ser considerada como un conjunto de constructos relacionados en cuanto a la receptividad o sensibilidad hacia  los otros.   w        Las interacciones tempranas padres-hijo tienen una importante influencia en el desarrollo emocional de los niños. Los niños aprenden inicialmente a expresar e interpretar emociones a través de las interacciones con sus cuidadores primarios. Durante la infancia los cuidadores influyen sobre el desarrollo emocional en la medida que proveen estímulos para la emotividad en momentos apropiados, refuerzan y estimulan la expresión emocional y responden a variaciones sutiles en las expresiones de los niños. w        La empatía de los niños está influida entonces en gran medida por experiencias tempranas de relación interpersonal.  En este sentido, en estudios anteriores se ha encontrado que la empatía de los niños está en gran parte explicada por los sentimientos empáticos que los niños perciben en sus padres. En nuestro trabajo hemos partido de la premisa de que más que el comportamiento “objetivo” de los padres lo que importa es lo que los niños perciben de ellos.  Con base en esta hipótesis, se ha encontrado no sólo que la empatía de los padres percibida por los niños explica gran parte del desarrollo de su propia empatía sino que además esta influencia varía según el género de los padres y los niños w        En efecto, los padres pueden estimular la actividad empática compasiva modelando la preocupación empática y utilizando formas de disciplina con orientación afectiva, que ayuden a los niños a entender los efectos perjudiciales de la angustia que puedan haber causado a otros. w        El tipo de relación con los padres parece estar también relacionado con el desarrollo de la conducta prosocial en los niños. w        Diversos estudios muestran que la calidad de las relaciones padres-hijo resultó ser un importante predictor del ajuste del niño en la infancia media y tardía. w        Los niños que tenían buenas relaciones con sus padres eran menos proclives a experimentar agresión manifiesta o indirecta, molestar a otros o involucrarse con pares desviados.  Estos niños se involucraban más en su trabajo escolar, tenían una más alta autoestima y menos problemas internalizados y tenían menos probabilidad de ser victimizados por otros.    w        Otros autores encontraron que las prácticas positivas de los padres (sensible, racional, crianza firme) tenían una cantidad de efectos positivos en los resultados de los niños, incluyendo los niveles de problemas de conducta y conductas pro sociales.   w        La calidad de la crianza juega un papel significativo en la determinación del ajuste social y emocional de los niños. Por otra parte el castigo y las interacciones punitivas entre padres y niños combinados con un control pobre de parte de los padres contribuyen a generar problemas de conducta en la infancia tardía.