INVESTIGADORES
QUINTANA Ruben Dario
artículos
Título:
Análisis preliminar de la estructura y composición de los parches de bosques ribereños utilizados por la Pava de Monte (Penelope obscura) en la Reserva de Biosfera “Delta del Paranᔠ(RBDP), Argentina
Autor/es:
MALZOF, SILVINA LAURA; VILLAR, MARÍA VALENTINA; SACCONE, PABLO; CASABURI, ANDREA; BILINSKY, ELENA; QUINTANA, RUBEN DARIO
Revista:
Revista electronica Manejo de Fauna Silvestre en Latinoamérica
Editorial:
Universidad de la Amazonía Peruana
Referencias:
Lugar: Iquitos, Perú; Año: 2006 vol. 1 p. 1 - 14
ISSN:
1074-7346
Resumen:
El objetivo del presente trabajo fue analizar la relación entre la presencia y abundancia de pavas de monte y las características estructurales de los distintos tipos de bosques presentes, tanto naturales como antrópicos, en la Reserva de Biosfera “Delta del Río Paranᔠ(34º 15’ 00” S, 58º 58’ 33” W). Esta reserva fue creada en el año 2000 y constituye la primer gran área protegida de esta región, con una superficie de 88.724 ha y un área núcleo de 10.694 ha. La Reserva protege poblaciones de especies amenazadas como el ciervo de los pantanos (Blastocerus dichotomus), el lobito de río (Lontra longicaudis) y la pava de monte (Penelope obscura), y especies de interés para la población local como el carpincho (Hydrochaerus hydrochaeris) y el coipo (Myocastor coypus). Fueron caracterizados parches de bosque ribereños (forestaciones activas de Salix spp. y Populus spp. y bosques secundarios) a lo largo de 33 km en las zonas núcleo, tampón y transición de dicha reserva. Fueron muestreados 154 sitios en 17 transectas, separados entre sí 500 m en ambas márgenesdel curso de agua. En cada sitio fueron registrados el número de estratos y la diversidad de especies vegetales presentes, así como cualquier otra característica del ambiente considerada relevante para la presencia o ausencia de pavas. Por otra parte, fueron realizadas entrevistas a informantes calificados (pobladores con muchos años de residencia en la zona). Este trabajo, que comenzó a fines de 2003, aporta algunos datos básicos preliminares sobre diferentes aspectos del hábitat de la pava de monte, así como información de base sobre diferentes aspectos biológicos y ecológicos. En 27 de los 154 sitios evaluados fueron registradas las pavas por observación directa de los individuos y por la presencia de signos de actividad. Los sitios utilizados por éstas fueron bosques secundarios que se desarrollaron en plantaciones abandonadas desde 10 a 20 años atrás. Estos poseían un sotobosque denso, con una altura entre 2 y 3 metros. También se pudo observar individuos en las zonas peridomiciliarias debido a la presencia de frutos en las áreas parquizadas. Los resultados muestran que las pavas se han adaptado a los ambientes modificados por la actividad humana, utilizando recursos alimenticios y de nidificación provenientes fundamentalmente de especies vegetales exóticas. Esto mostraría que esta especie ha cambiado sus hábitos a fin de adecuarse a las nuevas características del ambiente, llegando a establecerse en sitios con alta actividad humana. En este sentido, el nuevo paisaje de las islas del Bajo Delta parece no haber afectado negativamente a las poblaciones de la pava de monte.Blastocerus dichotomus), el lobito de río (Lontra longicaudis) y la pava de monte (Penelope obscura), y especies de interés para la población local como el carpincho (Hydrochaerus hydrochaeris) y el coipo (Myocastor coypus). Fueron caracterizados parches de bosque ribereños (forestaciones activas de Salix spp. y Populus spp. y bosques secundarios) a lo largo de 33 km en las zonas núcleo, tampón y transición de dicha reserva. Fueron muestreados 154 sitios en 17 transectas, separados entre sí 500 m en ambas márgenesdel curso de agua. En cada sitio fueron registrados el número de estratos y la diversidad de especies vegetales presentes, así como cualquier otra característica del ambiente considerada relevante para la presencia o ausencia de pavas. Por otra parte, fueron realizadas entrevistas a informantes calificados (pobladores con muchos años de residencia en la zona). Este trabajo, que comenzó a fines de 2003, aporta algunos datos básicos preliminares sobre diferentes aspectos del hábitat de la pava de monte, así como información de base sobre diferentes aspectos biológicos y ecológicos. En 27 de los 154 sitios evaluados fueron registradas las pavas por observación directa de los individuos y por la presencia de signos de actividad. Los sitios utilizados por éstas fueron bosques secundarios que se desarrollaron en plantaciones abandonadas desde 10 a 20 años atrás. Estos poseían un sotobosque denso, con una altura entre 2 y 3 metros. También se pudo observar individuos en las zonas peridomiciliarias debido a la presencia de frutos en las áreas parquizadas. Los resultados muestran que las pavas se han adaptado a los ambientes modificados por la actividad humana, utilizando recursos alimenticios y de nidificación provenientes fundamentalmente de especies vegetales exóticas. Esto mostraría que esta especie ha cambiado sus hábitos a fin de adecuarse a las nuevas características del ambiente, llegando a establecerse en sitios con alta actividad humana. En este sentido, el nuevo paisaje de las islas del Bajo Delta parece no haber afectado negativamente a las poblaciones de la pava de monte.