INVESTIGADORES
OVIEDO Eduardo Daniel
artículos
Título:
Brasil-China: de la armonía a la cooperación
Autor/es:
OVIEDO, EDUARDO DANIEL
Revista:
Global Asia Magazine
Editorial:
Global Asia
Referencias:
Lugar: Barcelona; Año: 2012 p. 44 - 47
ISSN:
1888-7341
Resumen:
La transformación de China y Brasil en grandes potencias económicas es uno de los hechos sobresalientes en las relaciones internacionales a inicios de la segunda década del siglo XXI. El crecimiento económico de estas dos naciones y el progreso de India y Rusia; junto al estancamiento de Estados Unidos, Japón y el retroceso de las naciones europeas, revirtieron la tendencia a concentrar el producto bruto mundial en pocos estados. El ascenso de Brasil, Rusia, India y China (BRIC) en la estratificación económica internacional abrió el Directorio de grandes economías a la participación de más naciones, aunque, al mismo tiempo, el rápido crecimiento de China tiende a reconcentrar la riqueza mundial.Estos nuevos roles de Brasil y China en la economía-mundo objetan el epígrafe oficial de ser los ?dos más grandes países en desarrollo?, defensores de la cooperación sur-sur. Es que al estar China posicionada como segunda economía del mundo y Brasil en el quinto lugar (detrás de Japón y Alemania y antes del Reino Unido), queda claro que son dos naciones del nuevo norte desarrollado, en pugna por mantener las posiciones adquiridas en la década anterior. Por lo tanto, la relación chino-brasileña reedita los vínculos inter-hegemónicos en la economía mundial y pronostica los roles que ambos estados tendrán en el presente siglo. Este esquema de relaciones norte-norte combina con el modelo norte-sur por la composición del comercio bilateral, caracterizada por las exportaciones brasileñas de materias primas y las ventas chinas de manufacturas. Esta complementación comercial es eje de las relaciones entre China y Sudamérica, pues la demanda china de materias primas armoniza con la oferta sudamericana y Brasil contribuye como principal exportador del subcontinente, cuyas ventas en 2011 representaron el 87% de las exportaciones del MERCOSUR a China. En principio, este esquema favorece el logro de los objetivos de ambas partes, pues Brasil incrementa sus exportaciones y obtiene amplios superávits comerciales (por ejemplo, 11.527 millones de dólares en 2011); al tiempo que garantiza a China el suministro de bienes estratégicos para su seguridad alimentaria, energética y para activar la fábrica china proveedora del mundo.