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Los compuestos orgánicos persistentes (COPs) comprenden sustancias de origen agrícola (Plaguicidas Organoclorados) e industrial (Bifenilos Policlorados). Muchos de ellos pertenecen al grupo de los POPs (Persistent Organic Pollutants), compuestos persistentes, bioacumulables, lipofílicos, factibles de transportarse por la atmósfera y causar efectos adversos a la biota cerca y/o a distancia de las fuentes. La contaminación ambiental por COPs, es un fenómeno complejo producido tanto por fuentes puntuales como difusas. Los suelos y sedimentos actúan como receptores, sumidero y fuentes secundarias de COPs al ambiente. La retención de los COPs en el suelo es considerado el proceso de mayor influencia sobre el comportamiento y destino en el ambiente, debido a que influye sobre otros procesos como transporte, degradación, volatilización o bioacumulación. La biota está expuesta directamente al impacto de dichos contaminantes bioacumulándolos en sus tejidos. Durante los últimos años se están desarrollando estudios integrales de la contaminación por COPs en cuencas centro-patagónicas de Argentina, abarcando diferentes matrices: suelos, sedimentos, biota, agua y aire, considerando procesos de bioacumulación, biomagnificación y estudio de biomarcadores enzimáticos. Se llevaron a cabo estudios sobre dinámica de COPs en suelos de zonas agrícolas, de cultivo orgánico y naturales considerando su impacto sobre especies vegetales comestibles, mesofauna (oligoquetos e insectos carábidos) así como el medio acuático adyacente (sedimentos, macrófitas, crustáceos y peces). Se estudiaron rutas de incorporación, factores de bioconcentración, translocación y biomagnificación de COPs abarcando diferentes tramas tróficas, profundizando en estudios de fitorremediación de suelos y sedimentos. Dichos estudios desarrollados a campo cobraron importancia considerando el uso de vegetación autóctona o comestible como una herramienta para la disminución o prevención de la contaminación por COPs en un ambiente en particular. Estudios integrales de la dinámica de COPs se realizaron en cuerpos lóticos y lénticos de la región centropatagónica de Argentina con el objeto de evaluar y comparar diferentes ambientes con características particulares. Resultados de los mismos alertan sobre los altos niveles de contaminantes en suelos (1300 ng/g peso seco), sedimentos (15 ng/g p.s.) y peces (40-43 ng/g hígado de trucha arco iris y 25.7 ng/g hígado de carpa común) de la cuenca del Río Negro, principal zona de producción de frutas (Patagonia) afectando al ecosistema en su conjunto. Los principales compuestos encontrados en todas las matrices fueron DDE, DDT y endosulfanes, respondiendo a una historia de uso pasado y reciente, respectivamente. Estudios latitudinales en sedimentos infieren un transporte global de COPs. Actualmente se está llevando a cabo un estudio regional, en el marco del Proyecto PROSUL que involucra a investigadores de Brasil, Chile y Argentina, en acículas de coníferas con el objeto de corroborar dichos resultados. Por otra parte, se evaluó el rol de la epífita Thillandsia bergeri como biomonitor de la contaminación atmosférica por COPs en ambientes agrícolas, industriales y naturales, resultando un buen indicador de variaciones espacio-temporales de los niveles de plaguicidas en uso, tal como el insecticida endosulfán.

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