Modelos de cambio en cobertura forestal de la Comuna del Manso y Foyel. ¿Una herramienta para definir estrategias de manejo?

GOWDA, J.H.; KITZBERGER, T.

BARILOCHE

Jornada; VI Jornadas Forestales Patagonicas; 2022

Los bosques del norte de la Patagonia andina se han expandido durante los últimos 100 años, avanzando sobre áreas incendiadas durante la llegada de colonos que buscaban abrir pasturas y parcelas agrícolas (Gowda, Kitzberger, & Premoli, 2012; T Kitzberger & Veblen, 1999; Willis, 1914). Esta expansión es producto de la combinación de procesos naturales de regeneración, una política pública nacional o provincial centrada en la prohibición de iniciar quemas en bosques y pasturas, crecientes inversiones en el control de incendios forestales, así como de la interacción entre los pobladores, su ganado y la vegetación (Blackhall, Raffaele, & Veblen, 2008; Raffaele, Veblen, Blackhall, & Tercero-Bucardo, 2011). En un primer esfuerzo institucional por ordenar el norte de la Patagonia, Bailey Willis (1914) elaboró mapas de cobertura vegetal, incluyendo los principales ríos, lagos, cumbres, senderos y caminos. Dicha base cartográfica complementa un estudio detallado de los usos del suelo de principios del siglo XX que sustenta una propuesta de plan de desarrollo regional. Una comparación a escala regional del relevamiento conducido por Willis e interpretación de cobertura basada en imágenes satelitales indica que, durante el período 1914 - 2003 la cobertura de bosque semillero ha avanzado sobre áreas incendiadas, pastizales y bajos rebrotantes, siendo la exposición y las precipitaciones dos variables significativamente asociadas a los procesos de cambio entre tipos de vegetación (Gowda et al., 2012). En este artículo utilizamos modelos de nicho para estimar la composición de los tres principales tipos de bosque semillero sensibles al fuego, lenga, coihue y ciprés a principios del siglo XX, y comparar dicha estimación con la cobertura actual de dichas comunidades, según el mapa elaborado por el CIEFAP, para estimar la capacidad histórica de expansión de dichas comunidades y su potencial futuro de avance ante diferentes escenarios de manejo y cambio climático.