INVESTIGADORES
GOMEZ Karina Andrea
congresos y reuniones científicas
Título:
Marcadores serólogicos para el diagnóstico y pronóstico de la enfermedad de Chagas
Autor/es:
SA. LONGHI; KA GOMEZ; S BRANDARIZ; S LAFON; MJ LEVIN
Lugar:
Santa Fe, Santa Fe
Reunión:
Congreso; XXIII Reunión Científica Anual de la Sociedad Argentina de Protozoología y Enfermedades Parasitarias (SAP); 2009
Institución organizadora:
Sociedad Argentina de Protozoología y Enfermedades Parasitarias (SAP)
Resumen:
El diagnóstico de la enfermedad de Chagas se basa fundamentalmente en el examen clínico y en los estudios serológicos, puesto que durante el período crónico se observa una baja parasitemia. El objetivo del presente trabajo fue determinar si un conjunto de anticuerpos de pacientes con Chagas crónico pueden ser marcadores específicos de diagnóstico así como también marcadores de progresión hacia formas clínica más severas como la cardiopatía chagásica crónica (CChC). Se analizó por ELISA el perfil serológico de 114 individuos no chagásicos y de 228 pacientes con enfermedad de Chagas clasificados como: cardiópatas severos, cardiópatas leves, digestivos y asintomáticos. El estudio de la respuesta inmune se realizó contra diferentes péptidos sintéticos derivados de antígenos recombinantes como JL18 y JL19 (derivado del recombinante JL9 de T.cruzi con homología con la MAP1B de mamíferos), R13, P013 y P0beta (derivados de las proteínas ribosomales P de T.cruzi), H11 (derivado de las proteínas ribosomales P humanas), TcHSP70 (derivado de la heat shock protein 70 de T.cruzi), la proteína JL7 (proteína flagelar asociada al citoesqueleto) y homogenato de T.cruzi. Los resultados indicaron que los mejores marcadores de infección fueron el homogenato de T. cruzi y la proteína JL7. Esta dupla antigénica se comporta como un excelente reactivo diagnóstico debido a su especificidad y sensibilidad. Así, la determinación de líneas de corte (método de ROC) o criterio de positividad más exigentes para los niveles de estos anticuerpos (anti-T.cruzi mayor a 4,35 y anti-JL7 mayor a 5,82) permitieron diferenciar a los grupos asintomáticos de los cardiópatas severos, pronosticando con un 70% de certeza la pertenencia a su correspondiente grupo. Si simultáneamente, además de estos niveles anti-T.cruzi y anti-JL7, se considera una línea de corte para el antígeno JL19 mayor a 1,0, la probabilidad aumenta a un 82,4% en aquellos sueros provenientes de pacientes con CChC severa. Por último, si se consideran además valores de anti-P013 mayor a 2,42, se observó que 9 sueros cardiópatas severos versus un suero de paciente indeterminado cumplieron con estas características, aumentando la certeza a 90%. Éstos resultados sugieren que existiría una relación entre la evolución hacia la CChC y la fuerte respuesta antiparasitaria contra determinantes antigénicos del parásito, entre ellos los epitopes correspondientes a la región C-terminal de las proteínas ribosomales P de T.cruzi.