INVESTIGADORES
FERNANDEZ CIRELLI Alicia
congresos y reuniones científicas
Título:
Arsénico en agua de bebida animal y alimentos de orígen bovino en Argentina
Autor/es:
A. PÉREZ CARRERA Y A. FERNÁNDEZ CIRELLI
Lugar:
San Martín, República Argentina
Reunión:
Taller; Taller de distribución del arsénico en Iberoamérica; 2006
Institución organizadora:
Centro Atómico Constituyentes
Resumen:
La toxicidad del arsénico presente en los alimentos depende de las formas químicas en que se encuentra dicho elemento, siendo las formas inorgánicas, As(III) y As(V), las que tradicionalmente han sido consideradas de mayor toxicidad. Estudios actuales demuestran que algunos compuestos orgánicos intermediarios productos de metabolismo podrían presentar una toxicidad comparable o superior (Hughes, 2002). En las regiones no afectadas por elevados niveles de As en el agua de bebida, los alimentos son generalmente la fuente principal de As (Adriano, 2001). La concentración de As en el alimento es variable. En la literatura internacional existe información acerca del contenido de As en productos de origen bovino; los trabajos informan el contenido de As en hígado, riñón, músculo esquelético y en la leche (p. ej. Cervera y col., 1994; López Alonso y col., 2000). Sin embargo, en Argentina, la información acerca de la concentración de As en cultivos y en alimentos, en particular los de origen bovino, es escasa. Hasta ahora todas las investigaciones realizadas han relacionado el HACRE con los niveles de As total en el agua de bebida, no existiendo estudios en los que se evalúe la incidencia que los alimentos pueden tener en la aparición de patologías asociadas a esta enfermedad. El énfasis con que se destaca el alto potencial tóxico del arsénico demuestra la importancia de evaluar los niveles de As en la cadena agroalimentaria bajo las condiciones de nuestros sistemas ganaderos, ya que el destino y distribución del As en el suelo y el agua, depende de las características edafoclimáticas de la zona. químicas en que se encuentra dicho elemento, siendo las formas inorgánicas, As(III) y As(V), las que tradicionalmente han sido consideradas de mayor toxicidad. Estudios actuales demuestran que algunos compuestos orgánicos intermediarios productos de metabolismo podrían presentar una toxicidad comparable o superior (Hughes, 2002). En las regiones no afectadas por elevados niveles de As en el agua de bebida, los alimentos son generalmente la fuente principal de As (Adriano, 2001). La concentración de As en el alimento es variable. En la literatura internacional existe información acerca del contenido de As en productos de origen bovino; los trabajos informan el contenido de As en hígado, riñón, músculo esquelético y en la leche (p. ej. Cervera y col., 1994; López Alonso y col., 2000). Sin embargo, en Argentina, la información acerca de la concentración de As en cultivos y en alimentos, en particular los de origen bovino, es escasa. Hasta ahora todas las investigaciones realizadas han relacionado el HACRE con los niveles de As total en el agua de bebida, no existiendo estudios en los que se evalúe la incidencia que los alimentos pueden tener en la aparición de patologías asociadas a esta enfermedad. El énfasis con que se destaca el alto potencial tóxico del arsénico demuestra la importancia de evaluar los niveles de As en la cadena agroalimentaria bajo las condiciones de nuestros sistemas ganaderos, ya que el destino y distribución del As en el suelo y el agua, depende de las características edafoclimáticas de la zona. López Alonso y col., 2000). Sin embargo, en Argentina, la información acerca de la concentración de As en cultivos y en alimentos, en particular los de origen bovino, es escasa. Hasta ahora todas las investigaciones realizadas han relacionado el HACRE con los niveles de As total en el agua de bebida, no existiendo estudios en los que se evalúe la incidencia que los alimentos pueden tener en la aparición de patologías asociadas a esta enfermedad. El énfasis con que se destaca el alto potencial tóxico del arsénico demuestra la importancia de evaluar los niveles de As en la cadena agroalimentaria bajo las condiciones de nuestros sistemas ganaderos, ya que el destino y distribución del As en el suelo y el agua, depende de las características edafoclimáticas de la zona.