INVESTIGADORES
FARIÑA Julia Ines
congresos y reuniones científicas
Título:
Biodecoloración de colorantes textiles reactivos con aislamientos de levaduras de ecosistemas vírgenes
Autor/es:
PAJOT H.F.; FARIÑA J.I.; FIGUEROA L.I.C.
Lugar:
S.M. Tucumán
Reunión:
Jornada; Primer Foro Regional de Salud Ambiental; 2004
Resumen:
Actualmente existen más de 100.000 colorantes sintéticos disponibles comercialmente, con una producción total que supera ampliamente las 700.000 Tn por año. Grandes cantidades de estos colorantes sintéticos son empleados a diario por industrias como la textil, de los alimentos, cosmética y del papel, siendo la primera la más importante de ellas. Por su parte, la industria azucarera produce también efluentes altamente coloreados como la melaza. En estos casos el color es el primer contaminante a ser reconocido y debe ser removido antes de su descarga tanto en cuerpos de agua como sobre la tierra. Aunque en nuestro país la legislación vigente no obliga a las industrias a la remoción de colorantes en sus efluentes, en muchos países desarrollados tanto en Europa como en USA existe un estricto control sobre este aspecto. Esto se ha transformado en un gran inconveniente para las industrias textiles que deben respetar normativas estrictas para el manejo y disposición de sus efluentes y que regulan otros aspectos como su radicación, habilitación, importación-exportación, etc. Además, según estadísticas recientes, en nuestro país el color es uno de los principales contaminantes de los efluentes textiles. Así, un 62% de las industrias textiles no realiza ningún tratamiento de descargas, un 28% realiza tratamientos incorrectos y sólo el 9% lleva a cabo un tratamiento apropiado. Esto es preocupante debido a que la poca eficiencia del proceso de tinción causa que un alto porcentaje de los colorantes sea descartado directamente sin haber sido empleado, provocando una contaminación significativa en los efluentes de dichas industrias. Además, la mayor parte de estos efluentes coloreados se descartan en cuerpos de agua como  mares, arroyos, lagunas, ríos, etc. La contaminación con colorantes causa un daño usualmente irreparable en el medio ambiente, principalmente debido al bloqueo de los procesos fotosintéticos en el medio acuático y también por la actividad tóxica y/o carcinogénica de los colorantes en sí mismos, de cloruros y metales pesados usados en los procesos de tinción, o bien por los que se denominan químicos auxiliares de la industria textil. A diferencia de los compuestos naturales que se degradan fácilmente al ser introducidos al ambiente como desechos, este tipo de compuestos sintéticos (conocidos como xenobióticos) son altamente recalcitrantes debido a que fueron diseñados para ser resistentes a la oxidación, cambios de temperatura, degradación por microorganismos, lavados, etc. El tratamiento de efluentes textiles por medio de procesos físicos y/o químicos como adsorción, transformación química, incineración, fotocatálisis u ozonización, es eficiente aunque costoso y generalmente presenta dificultades operacionales serias. Ante este panorama, la biodecoloración (eliminación biológica de colorantes) aparece como un método alternativo, eficaz, relativamente sencillo, no agresivo para el medio ambiente (eco-friendly) y competitivo en costos. Cuando se considera la degradación de colorantes por microorganismos, es importante también tener en cuenta el metabolismo involucrado, ya que en ciertas ocasiones se pueden generar compuestos biotóxicos aún más nocivos que el colorante original. Por esta razón, la maquinaria oxidativa de hongos filamentosos y levaduras es una valiosa alternativa a fines de evitar la formación de aminas aromáticas carcinogénicas. Como posible solución a esta problemática, proponemos la utilización de eucariotas inferiores para la biodecoloración de colorantes textiles. Se propone evaluar para tales fines, levaduras de ecosistemas vírgenes de la reserva de Las Yungas, a fin de poner de manifiesto un potencial de esta región que no fue explotado convenientemente hasta el presente.