Promover la cognición social modula la integración entre pares y el estrés crónico en niños de mediana infancia

CARRO REGALADO, N.; D'ADAMO, PAOLA; LOZADA MARIANA

Encuentro; XVII Reunión Nacional y VI Encuentro Internacional de la Asociación Argentina de Ciencias del Comportamiento RACC, 2020,; 2020

IntroducciónEn las últimas décadas se ha registrado una alta incidencia del estrés crónico en niños de edad escolar. La permanencia en el tiempo de situaciones o eventos estresantes puede dar lugar a una activación sostenida del sistema de respuesta de estrés (eje hipotalámico-pituitario-adrenal, HPA) perjudicando el desarrollo psico-físico saludable, conposibles consecuencias negativas a largo plazo. En recientes estudios, la evaluación de la concentración de cortisol en cabello (CCC) ha demostrado ser un indicador preciso de la actividad del eje HPA que refleja los niveles de estrés crónico en niños. Durante la infancia, las relaciones sociales hostiles entre pares constituyen uno de los principales factores estresantes. Asimismo, la integración social puede ayudar a atenuar los efectos de experiencias negativas mediante procesos de stress-buffering, contribuyendo a disminuir la respuesta fisiológica al estrés. Dado que el desarrollo de procesos socio-afectivos, socio-cognitivos e interoceptivos ligados a la empatía contribuye a modular positivamente la conectividad social, la participación en instancias contextuales que promueven dichos procesos de cognición social podría disminuir los niveles de estrés crónico, propiciando la salud y el bienestar en niños de mediana infancia. ObjetivosEl objetivo del presente estudio fue evaluar la influencia modulatoria de la participación corporizada e intersubjetiva en un programa de intervención escolar que promueve procesos de cognición social sobre la integración entre pares y los niveles de estrés crónico en niños de 7-8 años de edad.MetodologíaLa investigación se realizó en una escuela de nivel primario de Bariloche. Una clase (8 niñas-10 niños) fue asignada aleatoriamente como grupo experimental (i.e., este grupo participó de la intervención) y otra clase (10 niñas-7 niños) formó parte del grupo control. El programa de intervención, llevado a cabo durante9 meses en encuentros semanales de 60 minutos, constó de tres instancias: dinámicas corporizadas de auto-percepción (que favorecen procesos interoceptivos), dinámicas de interacción intersubjetiva colaborativo-empática (que promueven procesos socio-afectivos)y dinámicas de interacción intersubjetiva de toma de perspectiva (que favorecen procesos socio-cognitivos). Se evaluó la integración social entre pares, mediante el Índice de preferencia social (IPS) obtenido a partir de un cuestionario sociométrico; y los niveles de estrés crónico, a través de la concentración de cortisol en muestras de cabello (CCC). Las variables fueron evaluadas antes de comenzar y al finalizar el periodo de intervención enel grupo experimental y control.ResultadosLos niños del grupo experimental mostraron un incremento significativo en el IPS luego del periodo de intervención (ANOVA, F=9,49; p0,05). La comparación del IPS entre los grupos experimental y control mostró diferencias significativas para la interacción entre las variables grupo y momento de muestreo (Slip plot ANOVA, F=9,84; p