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El comportamiento mecánico y térmico de los cementos óseos acrílicos resulta fundamental para el éxito a largo plazo de cirugías como la vertebroplastía. En este sentido, la mayor capacidad del material para absorber energía de un impacto y transformarlo en deformación disminuye el riesgo de generar fracturas de vertebras adyacentes a la reparación mientras que, una menor temperatura de cura evita la necrosis de tejido celular lindante lo que permite una mayor osteointegración del cemento óseo con el tejido óseo.Paralelamente, el uso de un agente de contraste inorgánico actúa siempre en detrimento de las propiedades mecánicas del producto final. En este sentido, se han desarrollado diferentes cementos óseos conteniendo polímeros acrílicos iodados combinados con un polímero ramificado, donde la cadena principal es un elastómero y las ramificaciones laterales son polimetacrilato de metilo. De igual forma, uno de los polímerosacrílicos iodados consiste en una cadena principal elastomérica donde las ramificaciones laterales están formadas por MMA y un monómero acrílico iodado. Estos polímeros iodados tienen la particularidad de ser opacos a la radiación X por lo que su uso en la formulación de los cementos óseos hace que se pueda eliminar el agregado de un agente de contraste inorgánico.Se analizó el nivel de contraste radiográfico de estos nuevos cementos óseos y se comparó con el nivel presentado por los cementos óseos comerciales. Se estudió además la respuesta mecánica frente a una solicitación en flexión cuasi estática, evaluándose así la elasticidad y la energía elastoplástica absorbida y transformada en deformación de los nuevos cementos óseos, Finalmente, se evaluó la respuesta térmica del material durante el proceso de cura.Estos cementos óseos presentan mayor elasticidad así como también menor temperatura de cura, comparados con los cementos óseos acrílicos comerciales

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