“Cuerpos, política, derechos. Anotaciones sobre un insistente asunto feminista”.

CIRIZA, ALEJANDRA

San Salvador de Jujuy

Jornada; IX Jornadas Regionales de Investigación en Humanidades y Ciencias Sociales; 2008

Facultad de Humanidades y Ciencias Sociales de la UNJU

Este trabajo, de índole filosófica,  apunta a precisar las formas de conceptualizar las relaciones entre cuerpo, política y derechos a partir del seguimiento de algunas nociones heredadas. Se realizará una revisión crítica de ciertos escritos de Locke  desde un punto de vista feminista  y a la luz de los problemas del presente. A partir de la modernidad, bajo el signo del ciclo de revoluciones burguesas, se produjo una nueva articulación entre corporalidad humana, orden familiar y orden político. Locke puso en palabras una crítica del poder absoluto y hereditario de la monarquía a través del establecimiento de una distinción entre el poder paternal, derivado del engendramiento corporal  y el que proviene del contrato, producto del consentimiento libre de los individuos.  Mientras los seres humanos singulares son corporales y sexuados, la comunidad política moderna es  producto de una operación de neutralización por la cual el cuerpo político nace del consentimiento de individuos que pierden, al ingresar al contrato, sus determinaciones de clase, de raza, de sexo. Si es verdad que en aquel momento histórico la distinción entre poder paternal y poder político, y la idea de un orden político nacido del consenso tuvo un cierto sentido emancipatorio para los individuos contratantes, varones, propietarios, letrados, blancos, también lo es que la operación de neutralización corporal tuvo efectos negativos sobre las mujeres, pues ellas, sólo por serlo, resultaban no incorporables al orden político.   No obstante, muchas de las demandas feministas de derechos ligados a las consecuencias políticas de las diferencias entre los sexos, como el derecho al aborto, los debates a propósito de la violencia contra las mujeres, la crítica de la heterosexualidad obligatoria, la necesidad de poner palabra a temas como el feminicidio, o la prostitución, son formuladas a partir de nociones  y herramientas conceptuales procedentes de esta tradición teórica. ¿Cuáles son sus límites y posibilidades de cara a los dilemas del presente? Si Rawls ha recurrido a Kant en procura de iluminaciones para pensar la cuestión de la justicia, este trabajo apunta a entablar un diálogo con el Locke de los Dos tratados y las Cartas sobre la Tolerancia.