Abarcas campesinas y momias for export

P. CRUZ

Arqueología, tierras y territorios, conflictos e intereses

Lucrecia Editorial

Lugar: Tucuman; Año: 2009; p. 111 - 142

A lo largo de su historia, la región del Salar de Uyuni ha sido una de las regiones rurales más olvidadas del país. Con una economía tradicionalmente basada en el cultivo de la quinua, la explotación de la sal y la cría de llamas, fue recién a partir de los años 1980 que comenzó a desarrollarse vertiginosamente la industria del turismo. Hoy, los 70.000 visitantes que recibe cada año, hacen de esta región uno de los principales polos turísticos de Bolivia. Bajo impulso de las agencias de turismo, el Estado, la cooperación internacional y las ONG’s, tratando de responder a la fuerte demanda del mercado y buscando una participación más efectiva en el negocio, desde hace algunos años las comunidades campesinas que bordean el Salar buscan crear sus propios recursos turísticos. En una caótica competencia por captar el interés de los operadores turísticos, muchas comunidades encontraron en su pasado y en la cultura una fuente de su oferta :  cuevas con momias, museos con restos arqueológicos  y « curiosidades » y sitios arqueológicos fueron abiertos a los visitantes. Dentro de un contexto global de valorización de lo « originario » -y de lo exótico-, las comunidades de la región se ven hoy en la encrucijada de conciliar sus modos de vidas con nuevos conceptos y pautas universales : entre ellas la mercantilización de la cultura y patrimonialización del territorio. Estos, muchas veces contradictorios, desembocan en una intensa dinámica de reformulación identitaria donde se puede percibir la histórica dialéctica colonial que distingue el buen indio del malo. Partiendo del caso de las comunidades del Salar Uyuni,  trataremos aquí de reflexionar acerca de las contradicciones, los conflictos y los peligros que conllevan los procesos de patrimonialización y mercantilización de la cultura en áreas rurales de Bolivia.