INVESTIGADORES
JEREZ Susana Josefina
congresos y reuniones científicas
Título:
“Dietas ricas en grasas modifican los niveles plasmáticos de lípidos y la interacción entre la Noradrenalina y la Angiotensina II en conejos”.
Autor/es:
LILIANA SIERRA; FABRICIO SCACCHI; MIRTA MEDINA; SILVIA SAAD DE SCHOOS; MARÍA PERAL DE BRUNO; SUSANA JEREZ
Lugar:
Rosario
Reunión:
Congreso; LXI Reunión Anual de la Sociedad Argentina de Farmacología Vascular Experimental (SAFE),; 2009
Institución organizadora:
Sociedad Argentina de Farmacología Vascular Experimental (SAFE),
Resumen:
Introducción: Existen numerosas investigaciones que dan cuenta de la de la relevancia de la interacción entre el sistema Renina-Angiotensina y el sistema adrenérgico. La Angiotensina II (ANGII) Produce vasoconstricción, no solamente a través de su interacción con los receptores AT1, presentes en el músculo liso vascular, sino también a través de su capacidad para modular la función simpática. Por otra parte se ha demostrado que la noradrenalina (NA) liberada regula negativamente los receptores de ANGII en tejido vascular a través de su interacción con receptores alfa1-ARs en neuronas cerebrales  y en el tejido vascular. En células musculares lisas de aorta de rata,  la NA produce una disminución de los niveles de ARNm para los receptores AT1 mediado por alfa1-ARs. Dietas ricas en grasas, producen alteraciones metabólicas (obesidad con o sin síndrome metabólico, ateroesclerosis e hipercolesterolemia). Como consecuencia de estas alteraciones se producen modificaciones en la reactividad vascular y en la activación del sistema Renina-Angiotensina y adrenérgico. Objetivos: El propósito de nuestro estudio fue analizar la influencia de dietas ricas en grasas en la interacción entre angiotensina II y noradrenalina .en arterias de conejo. Conejos machos híbridos de Flanders fueron alimentados con dieta control (DC), adicionada con 1 % colesterol durante 6 semanas (DH) o adicionado con 6,67% de grasa de cerdo y 3,33% aceite de maíz (DO). Los animales fueron pesados semanalmente,  antes de ser sacrificados, fueron anestesiados con ketamina y se realizaron mediciones de presión arterial, por método directo. En el caso de los modelos (DH) y (DO) se extrajo sangre, se separó el plasma y se realizaron mediciones de Colesterol total (CT), HDL, LDL, triglicéridos y glucemia en condiciones basales (por métodos colorimétricos). La aorta torácica fue aislada y seccionada en anillos, que fueron montados en baño de órgano para registrar contracciones isométricas en arterias con endotelio. El protocolo consistió en realizar una curva dosis respuesta acumulativa (CDRC) a la Acetilcolina (Ach) después de una contracción con NA 5.10-6 M. Luego de lavar se realizó una CDRC a NA, se lavó y se realizó a continuación una CDRA a ANGII. En otro grupo se efectuó primero una CDRA a la ANGII y luego a la NA. Resultados: Los resultados mostraron que en el caso del modelo DO se produjo un aumento de la presión arterial media (DG: 75±2 vs DC: 63±5 mmHg, n=8, p<0,05), intolerancia a la glucosa (sin modificaciones en la glucemia basal) y dislipidemia, también observada en conejos DH, por la modificación observada en el perfil de ácidos grasos libres: incrementos en ácido araquidónico (DO: 3,0 vs 5.6 %) (DH: 3.0 vs 6.3%), eicosapentaenoico (EPA) (0.24 vs 0.17 %) (DH: 0.24 vs 0.3 %) y docosahexaenoico (DHA) (DO: 1.97 vs. 3.7 %) y (DH: 1.97 vs 2.1%) a diferencia el modelo DH (DC 81 ± 10 mmHg vs 88 ± 8 mmHg vs D).   En arterias de conejos con DO se observo pérdida de afinidad a la Acetilcolina llegando a obtener una relajación máxima similar a DC, sin embargo en  DH se observó disminución tanto en la respuesta máxima (Rmáx) como en la afinidad a la Ach. La respuesta a ANGII  mostró desensibilización  tanto en arterias DH (pD2 7.87±0.06 vs 7.63±0.07; p<0.02) como DG (pD2 7.55±0,13 vs 7.03±0.16; p≤0.01) cuando se realizó una CDRC a la NA previamente  a diferencia de arterias CD 5.29±0.08 vs 5.28±0.09 en las que no se observó dicho efecto. En arterias DH se observó una sensibilización a la NA cuando se realizó una CDRC a la Ang II previamente (pD2 6.11±0.18 vs 6.55±0.04 p ≤ 0.01), a diferencia de  DC donde Ang II desensibiliza la respuesta a NA (6.36±0.06 vs 4.75±0.14 p≤0.01). y DO donde no hubo alteraciones (5.29±0.08 vs 5.28±0.09) . Conclusiones: Dietas ricas en grasas, modifican la interacción entre NA y Ang II. Estas modificaciones vasculares tempranas pueden inducir una injuria vascular a largo plazo desembocando en el daño de órgano blanco característico de las patologías cardiovasculares.