Manual de políticas públicas ambientales para la provincia de Tucumán

JULIA, JUAN PABLO ; ABDALA CRISTIAN SIMÓN

Estado y propuestas para la de conservación de los vertebrados terrestres de Tucumán; en el libro

UNSTA

Lugar: Tucuman; Año: 2018; p. 127 - 133

Tucumán es la provincia más pequeña de la Argentina, pero también la más densamente poblada. A pesar de su escasa superficie, en la provincia están representadas 4 grandes ecorregiones (Altoandina, Chaco, Monte y Yungas), otorgándole una diversidad paisajística, climática y ambiental particular, quese traduce en una alta diversidad biológica. Numerosos naturalistas y científicos destacados, como Burmeister, Hieronymus, Holmberg, Shipton, Lillo y Olrog (Lomáscolo et al., 2014) y exploradores como Andrews (1966), dieron cuenta de la exuberancia y diversidad de la naturaleza tucumana. Esta diversidad ha colocado a nuestra provincia entre las más ricas de Argentina, aspecto en el que resalta su fauna de vertebrados (Tabla 1). Los vertebrados son uno de los grupos más llamativos para el hombre, sea por afinidad filogenética, por su tamaño, por su variedad de formas, colores y modos de vida o por los usos que se les ha dado. Tucumán es también la provincia más industrializada del norte argentino. Las principales industrias están vinculadas a la elaboración de productos derivados del sector agropecuario (caña de azúcar y limón). El desarrollo de la agricultura y la industria asociada a la misma, ocasionó la perdida, degradación y fragmentación de la mayor parte de la región chaqueña y la selva pedemontana de Yungas, así como la contaminación del río Salí (el principal río de la provincia) y varios de sus afluentes. Este y otros factores menores como la introducción de especies exóticas, la ganadería de monte, la tala selectiva y el crecimiento de las ciudades, tuvieron un fuerte impacto sobre la diversidad de la provincia (Vides Almonacid et al., 1998). Problemáticas como la destrucción y degradación de ambientes y su contaminación, han tenido respuestas a través de un conjunto de leyes ambientales de parte del Estado (Secretaría de Medio Ambiente de Tucumán, 2007; Ley 26331 Bosques Nativos, 2007). Sin embargo, se carece de una política clara en materia de especies exóticas. Las especies de fauna exóticas introducidas tienen un impacto potencial muy grave para la fauna autóctona. En algunos casos estas introducciones no prosperaron, como la del ciervo colorado (Grau et al, 1995); mientras que en otros casos, como el de la trucha arco iris, se siembra oficialmente, todos los años, desde la dirección de Flora, Fauna Silvestre y Suelos de la provincia, incluso en o cerca de reservas provinciales, como los Sosa, algo específicamente vedado por la ley 3778 y la ley 6292 (Secretaría de Medio Ambiente de Tucumán, 2007). Esto tiene un impacto aún no mensurado, pero potencialmente muy grave, en poblaciones de peces y anfibios autóctonos (Fernández y Fernández, 1998; Vaira et al., 2012).