INVESTIGADORES
BOUZA Pablo Jose
congresos y reuniones científicas
Título:
RELACIONES EDAFO-GEOMORFOLÓGICAS EN EL DISTRITO URANÍFERO PICHIÑÁN ESTE, CENTRO DE LA PROVINCIA DEL CHUBUT
Autor/es:
BOUZA, P.J.
Lugar:
Ushuaia
Reunión:
Congreso; VI Congreso Argentino de Cuaternario y Geomorfología; 2015
Institución organizadora:
Asociación Argentina de Cuaternario y Geomorfología
Resumen:
La presente contribución comprende parte del estudio de la línea de base ambiental en Edafología del yacimiento de uranio Cerro Solo, ubicado en la región central de la provincia del Chubut (Fig. 1a). Dicho estudio fue financiado por la CNEA mediante el convenio CNEA-CONICET (resolución 3315).Para cada Unidad Geomorfológica (UG) se delimitaron las Superficies Geomórficas, las cuales están definidas en términos de la génesis de los componentes de la geoforma, de la edad y de los rasgos pedogenéticos (Gile et al. 1981). Se distinguieron siete UG (Fig. 1b): (1) Peneplanicie Exhumada (PE), (2) Pedimentos de Flanco Convergentes de la PE (PFC-PE), (3) Pedimentos de Flanco Convergentes (PFC), (4) Pedimentos Cubiertos Mesetiformes (PCM), (5) Antiguas Bajadas Aluviales de Piedemonte (Al), (6) Abanicos Aluviales Coalescentes Modernos (AA) y (7) Planicies Aluviales Actuales (PAA) y Mallines (M) asociados. Asimismo fueron reconocidos rasgos geomorfológicos recurrentes en la mayoría de las unidades como son los bajos endorreicos (BE) y las escarpas de erosión (EE). Las superficies geomórficas son indicadas de mayor a menor edad relativa con números arábigos.La PE comprende lomadas redondeadas de vulcanitas mesosilíceas de la Formación Lonco Trapial (Jurásico medio). Los suelos, si bien son someros, presentan desarrollo de horizontes con rasgos de iluviación de arcillas y costras petrocálcicas entre los fragmentos rocosos. Los suelos fueron clasificados como Petrocalcides cálcicos líticos. Los PFC-PE se encuentran confinados entre las lomadas de las vulcanitas. Esta unidad se desarrolla en las sedimentitas continentales del Grupo Chubut (Cretácico), que rellenaron los paleovalles labrados en la Formación Lonco Trapial. Estos suelos, en general, fueron clasificados como Natrargides típicos. Los PFC se asocian a superficies de erosión labradas también sobre las sedimentitas del Grupo Chubut y en general se encuentran muy disectadas, reconociéndose al menos tres superficies geomórficas. Los suelos del nivel de pedimento 1 (PFC1) suelen observarse erosionados y fueron clasificados como Torriothentes típicos dominantes, seguidos de Haplocalcides típicos. El nivel de pedimento 2 (PFC 2) muestra una mayor distribución. Los suelos se presentan como una asociación de Haplargides, Calciargides, Natrargides y Natrigypsides, todos típicos. El nivel de pedimento 3 (PFC 3) está asociado a las escarpas de erosión de las sedimentitas del Grupo Chubut. Generalmente se caracteriza por tener suelos de poco desarrollo clasificándolos en su mayoría como Torriorthentes típicos y Torriorthentes líticos. Los Pedimentos Cubiertos Mesetiformes (UG PCM) están constituidos por antiguas superficies de agradación relictas, depositadas sobre las sedimentitas del Grupo Chubut. En general son depósitos tabulares de psefitas y psamitas que corresponden a la Formación Renguenao (Pleistoceno). Se distinguen al menos cuatro niveles de pedimentos mesetiformes. Los más antiguos (PCM1- PCM3) constituyen relictos aislados que sobresalen del relieve. Los suelos fueron clasificados como Haplocalcides típicos. En los PCM4 la forma de los perfiles evidencia menor grado de evolución que los suelos de los otros niveles, presentando solamente un horizonte cálcico. En uno de los perfiles se observa un paleosuelo con evidencias de iluviación de arcillas, meteorización química y carbonatación. Los suelos en estas superficies geomórficas fueron clasificados también como Haplocalcides típicos. Las Antiguas Bajadas Aluviales de Piedemonte (UG Al) se componen de tres sistemas de abanicos aluviales relictos. Si bien estas superficies geomórficas presentan igual génesis, materiales parentales y suelos similares, los mismos difieren en su grado de desarrollo de acuerdo a su edad relativa. La superficie geomórfica Al1 presenta suelos con horizontes subsuperficiales cálcicos y petrocálcicos. La superficie geomórfica Al2, si bien no presenta un horizonte cálcico de mayor desarrollo que los suelos de Al1, exhibe un horizonte de alteración. La superficie geomórfica Al3 se sobreimpone y/o secciona a la Al1. En los horizontes cálcicos suelen observarse fragmentos de costras petrocálcicas provenientes de horizontes petrocálcicos de las superficies más antiguas.Los Abanicos Aluviales Coalescentes Modernos (UG AA) se desarrollan en la salida de detritos de los dos principales arroyos del área. Los materiales parentales se componen de depósitos aluviales con cierta estratificación y gravas provenientes de las sedimentitas del Grupo Chubut. En esta unidad se distinguen dos generaciones de abanicos, los más antiguos (AA1) presentan Natrargides típicos. Asociados a esta unidad se observan otros lóbulos más modernos (AA2) desarrollados por encima de los AA1. Estos suelos suelen presentar un horizonte de iluviación enterrado que se correlaciona con los horizontes nátricos de los suelos descriptos en AA1. Los suelos fueron clasificados como Haplocalcides sódicos y Torriorthentes típicos.Las Planicies Aluviales Actuales (UG PAA) corresponden a las planicies activas de los arroyos principales y en general a las planicies de pequeños cursos que se distribuyen en toda la zona constituyendo las vías del escurrimiento hídrico superficial, no sólo como tributarios de los arroyos mencionados, sino también hacia los bajos endorreicos. Los suelos fueron clasificados como Torrifluventes típicos. Los Mallines (M) asociados a estas planicies presentan un régimen de humedad ácuico (suelos hidromórficos) y fueron clasificados como Torrifluventes y Haplocalcides ácuicos.De lo expuesto se concluye que el estudio de la relación geomorfología?suelos, constituye una herramienta no sólo para correlacionar depósitos inconsolidados, sino también para caracterizar el contenido pedológico de las unidades geomorfológicas. Gile, L., Hawley H. J. y Grossman R. B. 1981. Soil and Geomorphology in the Basin and Range area of southern New Mexico. Guidebook to the Desert Proyect, Memoir 39, New Mexico Bureau of Mines and Mineral Resourses, 222 p.