INVESTIGADORES
NOVICK Susana
capítulos de libros
Título:
Prologo
Autor/es:
SUSANA NOVICK
Libro:
Migraciones internacionales en la Argentina: panorama socioterritorial en tiempos del Bicentenario.
Editorial:
CONICET, IMHICIHU Instituto Multidisciplinario de Historia y Ciencias Humanas
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2021; p. 1 - 6
Resumen:
En el campo de las Ciencias Sociales existe consenso de que en el mundo, durante el período comprendido entre 1945 a 1970, se vivió una época de bienestar que trajo aparejado un rápido crecimiento económico, bajos niveles de desempleo, alta productividad y mejoras moderadas pero claramente asociadas a tendencias igualitarias . A partir de esa etapa se produjo un retroceso caracterizado por: menor crecimiento económico, mayor desempleo, creciente desigualdad, inestabilidad del sistema financiero y una tendencia constante a rebajar los niveles de vida de los sectores populares .A partir de la década de 1980, la expansión y consolidación de la globalización neoliberal fue creando y profundizando asimetrías, desigualdades e inequidades que impusieron una constante vulnerabilidad social en los países periféricos, circunstancia que provocó la migración de vastos grupos poblacionales como ?solución? para mejorar sus vidas e incluso para salvar su integridad física.La globalización vigente ha creado en el planeta no solo mercados de producción y consumo homogéneos, sino que también ha impuesto un modelo social, económico y cultural hegemónico que implica desconocer, rechazar y desvalorizar todo aquello que no pertenezca a la elite dominante. La globalización ha pretendido garantizar eternamente la libre circulación de capitales -para proteger y aumentar sus ganancias- mientras ha impedido la circulación de personas; a pesar de que el inicio del capitalismo ha estado fuertemente asociado a las migraciones de millones de personas del campo a la ciudad.Aún no existe consentimiento entre los autores acerca de la relación entre el proceso de globalización capitalista y las migraciones. En los últimos treinta años, el término globalización ha sido citado insistentemente para describir una nueva situación internacional caracterizada por el achicamiento del espacio planetario y la acentuada interdependencia entre las sociedades. No obstante, se ha señalado que el proceso no es nuevo, sino que acompaña al hombre desde tiempos remotos . Quijano asevera que la globalización constituye la culminación de un proceso que comenzó con la constitución de América y del capitalismo colonial, moderno y eurocentrado como un nuevo patrón de poder mundial. La precariedad, la explotación, la marginación laboral y social que sufren los migrantes en el mundo desarrollado tiene sus raíces en ese patrón de poder colonial y aquella constitutiva idea de que el salario solo era para los blancos, los demás (negros, mestizos, asiáticos, etc.) debían trabajar sin salario. El autor afirma que ese poder genera también una perspectiva y un modo de producir conocimiento eurocentrista. Y desde esta visión eurocéntrica se considera a ciertas razas como "inferiores" por no ser sujetos "racionales", circunstancia que las convierte en dominables y explotables .Observamos un contexto internacional caracterizado por profundos cambios políticos, económicos y sociales: caída del bloque soviético, expansión de nuevas tecnologías, concentración del poder económico y militar en el Norte, crecientes desigualdades entre países, fortalecimiento de las corporaciones financieras internacionales, avasallamiento del derecho internacional, debilitamiento de las instituciones democráticas, creciente intervención de los países del Norte en las cuestiones internas de los países en desarrollo, saqueo de los recursos naturales en la periferia, sometimiento de la naturaleza, etc. Un orden internacional basado en la concepción de que hay un patrón civilizatorio que es simultáneamente superior y normal . Said se pregunta acerca del rol de los migrantes, quienes intentan participar de ese desarrollo superior y único. El rechazo, la exclusión y la explotación con que ese mismo mundo occidental les responde, convierte a las migraciones en un acto extremadamente clarificador, quizá el más autorizado y genuino para hacer evidente la contradicción básica que sustenta y da origen a ese tipo de desarrollo . En la actual etapa de globalización neoliberal capitalista ?hoy cuestionada-, los procesos migratorios se encuentran insertos en un mundo de centros poderosos y periferias subordinadas. Las migraciones tienen la particularidad de exhibir las incongruencias y limitaciones del capitalismo que sustenta esa globalización. Con su sola existencia los migrantes impugnan, refutan el orden neoliberal exponiendo sus llagas y fracasos. Por otra parte, dada la heterogeneidad de sus experiencias, también pueden erigirse en lentes para el estudio de procesos transformadores más generales (sociales, políticos, económicos y culturales) a través de escalas geográficas .La experiencia argentina entre 2003 y 2015 implicó la construcción -desde la periferia y a contrapelo de la tendencia mundial-, de un modelo alternativo migratorio de inclusión, formulado dentro de un proceso de integración regional. El modelo, surgido de las luchas, resistencias y autoorganización de los migrantes, así como de la tarea colectiva desplegada desde el campo político y académico junto con otros actores sociales ?asociaciones de migrantes, organizaciones religiosas, ONG, sindicatos, etc.-, cristalizó un cambio histórico en la Argentina: la derogación de la ley migratoria de la dictadura militar (vigente desde 1981) y la sanción de una nueva norma elaborada por la democracia (Ley 25.871). Norma obviamente imperfecta, pero que si la percibimos desde una perspectiva regional latinoamericana, adquiere un creciente valor en contraste con muchos países del Cono Sur, que si bien han dejado atrás sus regímenes de facto, aún hoy, a pesar de los años transcurridos, no han podido desprenderse de los marcos normativos e ideológicos dictatoriales. Y si la colocamos en un contexto internacional, adquiere un mayor mérito, pues no encontramos ningún país receptor de migrantes ?la Argentina es uno de ellos- que consagre el derecho a migrar como un derecho humano esencial al cual el Estado debe proteger y garantizar. La pérdida de derechos sufrida en esta temática desde el año 2016 hasta fines del 2019, ocasionada por las arbitrarias e inconstitucionales políticas adoptadas por el gobierno de Mauricio Macri, aún no ha podido ser reparada.En este horizonte, el conocimiento académico adquiere nuevos protagonismos. La mirada crítica de los científicos sociales aporta una perspectiva reflexiva para explicar, comprender y enfrentar estos procesos. Si los migrantes se atreven a desafiar los controles de frontera, los investigadores debemos desafiar las fronteras cognitivas, las posturas eurocéntricas o coloniales, los esquemas arraigados que ahogan ideas interpretativas nuevas y emancipadoras.El libro que ustedes van leer resume muchos años de esfuerzos de investigación de un conjunto de colegas especializados en la temática migratoria, que pretende ahondar sobre un campo de estudio que tiene una larga tradición en la Argentina. Tradición sustentada en nuestra propia evolución como sociedad en la cual convergen diversas culturas, colectividades, etc.De la lectura de este libro -financiado con fondos públicos-, elaborado desde diferentes campos académicos: la geografía, la sociología, la antropología social, la demografía, la historia, la geopolítica, la economía, la semiótica, las relaciones internacionales, etc.; surgen fructíferas constataciones: a) la aplicación creativa y armonizada de diferentes marcos teóricos y metodologías de análisis que exhiben la multiplicidad de perspectivas de los autores; b) la utilización de fuentes censales da sustento a varias investigaciones, así como el uso de otras valiosas: entrevistas ?en profundidad, estructuradas, semi-estructuradas, relatos de vida, etc.-, documentos oficiales, informes gubernamentales, páginas de Internet y otros accesos virtuales a través de los cuales los migrantes expresan sus sentimientos, necesidades y aspiraciones; c) el análisis del marco histórico de cada uno de los colectivos estudiados aporta elementos originales para la comprensión del fenómeno; d) la diversidad de tipos de migraciones abordadas: familiar, individual; espontánea, planificada; internas, internacionales; históricas, contemporáneas; limítrofes, latinoamericanas y europeas; Sur-Sur, Sur-Norte, Norte-Sur; e) la utilización de mapas, esquemas y fotos que enriquecen los trabajos realizados; f) las múltiples escalas estudiadas: local, provincial, nacional, regional, global; g) el hallazgo de las complejas causas que originan la decisión de migrar; h) el estudio de elementos que integran el fenómeno migratorio desde los macro-estructurales hasta los relacionados con la subjetividad y la cotidianeidad; i) el análisis de la territorialidad desde disímiles categorías: los espacios fronterizos, los transfronterizos, los transnacionales, la segregación urbana, etc.; j) los efectos de los diferentes estatus jurídicos de los migrantes: refugiados, asilados, regulares, irregulares, documentados, indocumentados, etc.A través del libro percibimos cómo los migrantes poseen la virtud de vincular lo local con lo global y las políticas migratorias serían caminos que perfilan cómo se da esa unión entre diferentes espacios. Asimismo, el énfasis colocado en los contextos de origen y destino resultan piezas esenciales para la comprensión de cada uno de los grupos estudiados. Los autores advierten que, a pesar de las reiteradas crisis, la Argentina aún constituye un foco de atracción de migrantes.Los elementos citados convierten al libro en un tesoro de conocimiento y descubrimiento, integrado por una recopilación que engloba continentes, etnias, clases sociales, procesos identitarios, inserciones laborales, etc.; transformando al texto final en un cuadro pleno e integral de las migraciones en la Argentina hacia finales del siglo XX y principios del siglo XXI, concluyendo el período de análisis en 2018.Hoy, ante la crisis sanitaria del planeta ?consecuencia de la explotación irracional de los recursos naturales-, parece que todo se tambalea. Los mercados financieros internacionales tiemblan, carecen de certidumbres y aún no han reaccionado frente a la nueva etapa que presenta situaciones originales: los países centrales, supuestamente desarrollados, carecen de insumos médicos para atender a sus poblaciones afectadas, carecen de políticas sanitarias claras, carecen de dirigencias inteligentes y ecuánimes capaces de enfrentar un desafío que el mundo occidental no esperaba. Se han convertido ?no sabemos por cuánto tiempo- en países vulnerables, inseguros, peligrosos. Como afirma Boaventura de Souza Santos, el problema sanitario agrava la situación de crisis a la que ya había sido sometida la población mundial, en un contexto en que el capitalismo neoliberal ha incapacitado al Estado para responder a emergencias .El mundo se ha transformado en inhumano. O quizá menos humano de lo esperado. Su precariedad ha quedado al desnudo. Esta deshumanización era ya anunciada desde las barcazas repletas de inmigrantes sorteando el mar Mediterráneo y desde los trenes y caravanas de América Central y México. Jean Paul Sastre escribió en 1961: ?No perdamos el tiempo en estériles letanías ni en mimetismos nauseabundos. Abandonemos a esa Europa que no deja de hablar del hombre al mismo tiempo que lo asesina por dondequiera que lo encuentra, en todas las esquinas de sus propias calles, en todos los rincones del mundo? . Y hoy podríamos agregar: No perdamos el tiempo, abandonemos a Estados Unidos que no deja de hablar de la democracia y al mismo tiempo la destruye dondequiera que la encuentre, en todos los rincones del mundo.La actual coyuntura sanitaria en el planeta trajo como consecuencia el cierre temporal de las fronteras, y esta circunstancia seguramente hará que la situación de los migrantes empeore agravando su vulnerabilidad. ¿Al no existir la posibilidad de transponer fronteras, qué sucede con los movimientos migratorios? ¿Podemos anticipar horizontes potenciales? No es fácil pronosticar futuros escenarios, pero si resulta claro que las condiciones de vida material de los migrantes está íntimamente vinculada a los avances o retrocesos (sociales, económicos, culturales, políticos) que se produzcan tanto en las sociedades desde las que parten como en aquellas a las cuales quieren llegar. Estamos frente a una gran crisis que pone en jaque a la dominación y el orden angloamericano y europeo, en la cual se encuentran inmersos los migrantes del mundo. Ellos, al unir mundos dispares y heterogéneos generan transformaciones en la sociedad (de recepción y de origen), interrogan y cuestionan los límites de nuestros sistemas democráticos, interpelando categorías como ciudadanía, residencia, nacionalidad. ¿Los migrantes resisten, reproducen o redefinen esas categorías? Por ello, son actores privilegiados, llamados a producir grandes y profundos cambios en el mundo. Desde su posición de explotados, excluidos, oprimidos, discriminados y vulnerables a la colonización cultural son los que sienten y sufren con mayor intensidad las injusticias del orden internacional. De allí que debe respetarse su derecho a migrar como su derecho a no migrar. Y en este libro el lector encontrará las explicaciones necesarias para comprender la trascendencia de los procesos migratorios acaecidos en el pasado y los del incierto futuro.Susana NovickBuenos Aires, 15 de mayo de 2020