INIBIOMA   20415
INSTITUTO DE INVESTIGACIONES EN BIODIVERSIDAD Y MEDIOAMBIENTE
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
Conocimientos y baches de conocimiento para predecir la dinámica de invasión de Bromus tectorum en Patagonia
Autor/es:
FRANZESE J.; LESCANO, M. N.; DI VIRGILIO A.; SPEZIALE K.; PIRK G.
Lugar:
La rioja
Reunión:
Congreso; VI Congreso Nacional de Conservación de la Biodiversidad; 2019
Resumen:
Entre las especies invasoras, aquellas que afectan al sector productivo se encuentran entre la más estudiadas por el impacto económico que pueden producir. En varios lugares del mundo, Bromus tectorum es una gramínea anual de origen euroasiático que trasforma notablemente los ecosistemas que invade. Particularmente, en EEUU invade más de 12.7 millones de hectáreas que se han perdido para la agricultura y la ganadería. Adicionalmente altera los regímenes naturales de incendio en la región generando pérdidas de biodiversidad importantes además de las pérdidas económicas. Esta gramínea se encuentra invadiendo Patagonia también, en una región con clima muy similar al de la región invadida en EEUU, aunque los impactos detectados hasta ahora son de menor magnitud que los observados en dicho país. Frente a esto nos preguntamos: si el comportamiento de B. tectorum en Patagonia podría ser diferente al presentado en EEUU de modo que los ambientes nativos y poco disturbados no se vieran afectados, o si es una cuestión de tiempo hasta que los impactos se produzcan. Para esto comparamos los primeros registros de la especie en ambos sitios, los estudios publicados sobre la especie a partir de dicho momento, y los impactos documentados en ambos casos. Encontramos que, en EEUU la especie fue registrada por primera vez unos 70 años antes que en Argentina y para cuando es detectada en nuestro país, en EEUU ya había sido declarada invasora. Los resultados de nuestras investigaciones recientes indican que en nuestra región B. tectorum es mejor competidora que pastos nativos y que su distribución avanza rápidamente en los últimos años, particularmente en sitios disturbados. Si bien aún se desconocen la distribución real y su dinámica poblacional parecería que el proceso de invasión va en aumento y que la ventana de oportunidad para controlarlo se estaría cerrando.