CICTERRA   20351
CENTRO DE INVESTIGACIONES EN CIENCIAS DE LA TIERRA
Unidad Ejecutora - UE
congresos y reuniones científicas
Título:
El Transporte de Polvo Atmosférico en el Sur de Sudamérica
Autor/es:
STEFANIA GILI
Lugar:
Córdoba
Reunión:
Jornada; VI Jornadas de Ciencias de la Tierra. Jóvenes Investigadores y Doctorandos de Geología; 2011
Institución organizadora:
JIDGEO-UNC
Resumen:
El polvo atmosférico (PA) transportado por el viento puede ser utilizado como un indicador de circulación atmosférica y como un importante elemento que suministra información sobre la geología y las condiciones climáticas que prevalecen en zonas consideradas potenciales áreas fuentes de dicho material. El interés por conocer la dinámica de transporte y depositación del PA es una temática que ha ido incrementándose con el paso del tiempo por el simple hecho de que éste influye en infinidad de procesos. El polvo atmosférico juega un importante rol en el sistema climático terrestre, cambiando el equilibrio en la atmósfera dado por la dispersión y la absorción de radiación. Además, puede servir como superficie de reacción para especies gaseosas reactivas presentes en la atmósfera y tiene también, un importante papel en lo referido a estudios paleoclimáticos, ya que su concentración en los diferentes registros sedimentarios es, a menudo, utilizado como un indicador proxy paleoclimático determinando aridez de los continentes y cambios en la dinámica del sistema global de los vientos. En el año 2002 Prospero et al., identificaron a escala global la distribución de las principales fuentes de PA y para el Sur de Sudamérica determinaron que eran 3 las más persistentes: Puna-Altiplano, Centro Oeste Argentino y Patagonia. Desde el año 2003 venimos llevando a cabo muestreos de Topsoils y de PA en distintos ambientes geomorfológicos de lo que se conoce como Diagonal Árida Sudamericana con el objetivo de caracterizar cada una de esas potenciales áreas fuentes en función del tamaño de grano, composición mineralógica, composición química (elementos de tierras raras, mayoritarios y trazas) y composición isotópica (Sr, Nd y Pb) para establecer la señal geoquímica de las mismas y compararla luego, con diferentes registros paleoclimáticos (testigo de hielo, sedimentos marinos, Loess, etc).