INVESTIGADORES
MIE Fabian Gustavo
artículos
Título:
EL CONCEPTO DE IDENTIDAD EN LA TEORÍA DE LOS COMPUESTOS ACCIDENTALES DE ARISTÓTELES
Autor/es:
FABIAN MIE
Revista:
REVISTA LATINOAMERICANA DE FILOSOFíA
Editorial:
CENTRO DE INVESTIGACIONES FILOSÓFICAS
Referencias:
Lugar: BUENOS AIRES; Año: 2006 vol. 32 p. 157 - 197
ISSN:
0325-0725
Resumen:
?La teoría aristotélica de los compuestos accidentales (entidades del tipo de Sócrates-culto, compuestas de un sujeto sustancial y un accidente) parece suscribir, si no formular expresamente, una restricción a contextos extensionales y no modales de la identidad entre un compuesto accidental y el sujeto sustancial incluido en dicho compuesto. En particular, dos paradojas detectadas, una epistémica y otra modal, habrían forzado a Aristóteles a efectuar tal restricción. Esta lectura de las paradojas alinea la solución aristotélica a modernos enfoques fregeanos y russellianos, a partir de los cuales se formulan nociones como las de opacidad referencial o el análisis que sustituye el sujeto gramatical por el predicado que lo incluye conservando el significado, así como también se plantea la debatida noción de identidad contingente. Sin embargo, la solución que Aristóteles da a las paradojas va en una dirección diferente. En efecto, en lugar de suscribir un principio de identidad como el formulado en la llamada Ley de Leibniz acerca de la identidad de los indiscernibles ?según la cual dos entidades cualesquiera son mutuamente idénticas si y sólo si una de ellas tiene todas las mismas propiedades que posee la otra, y viceversa?, creo que Aristóteles propone aplicar a ciertos casos especiales de su propia ontología un principio de identidad algo diferente o, cuanto menos, más articulado que el leibniziano en la medida en que el principio aristotélico de identidad recurre a una teoría sobre las propiedades esenciales cuya fundamentación el estagirita aborda en su metafísica. El descubrimiento de ese principio podría haber estado motivo por el hecho de que algunas entidades de la propia ontología aristotélica pueden ciertamente satisfacer la condición de identidad formulada en los términos generales de la sustituibilidad, pero dentro de su metafísica existen razones de peso para no considerarlas estrictamente idénticas. En efecto, las cosas dichas de un compuesto accidental pueden ser las mismas que las dichas del sujeto del compuesto, y, por indiscernibles, ambas entidades (el compuesto y el sujeto) deberían considerarse idénticas. Sin embargo, como intentaré mostrar, esta consecuencia resulta contraria a teoremas centrales de la teoría aristotélica, y por ello, a fin de obtener una noción de identidad estricta, el estagirita se ve precisado de formular condiciones más precisas que las especificadas en la mera coincidencia extensional de los predicados a través de la cual la noción leibniziana establece que dos cosas son idénticas. Creo que la posición aristotélica acerca de la identidad que intentaré aquí perfilar forma parte de la fundamentación del primer esencialismo aristotélico; concretamente, la demarcación de una identidad estricta conduce a Aristóteles no sólo a rechazar cualquier intento de elucidar la noción de identidad en términos de semejanza cualitativa, sino más aun a delimitar una clase de propiedades sustanciales como la única que puede explicar la identidad estricta entre dos objetos. Pero esta cuestión programática debe quedar para otra ocasión?.