Diferentes aproximaciones de modelos de hábitat para el estudio y manejo del jaguar (Panthera onca) en el Bosque Atlántico del Alto Paraná.

DE ANGELO, C.; PAVIOLO, A.; DI BITETTI, M. S.

Salta

Congreso; X Congreso Internacional de Manejo de Fauna Silvestre en la Amazonía y Latinoamérica.; 2012

La población de jaguares que sobrevive más al sur en el continente habita en el Bosque Atlántico del Alto Paraná (BAAP), una ecorregión seriamente amenazada distribuida en la triple frontera de Argentina, Brasil y Paraguay. Nuestro objetivo fue conocer la distribución y elaborar modelos de hábitat para la conservación de esta especie en el BAAP. Desarrollamos un sistema de monitoreo participativo mediante una red de voluntarios para obtener datos de presencia del jaguar en la región. Utilizamos estos registros en un análisis factorial de nicho ecológico (ENFA) de manera comparativa con el puma (Puma concolor). Usamos el modelo de hábitat resultante para generar pseudoausencias para aplicar modelos lineales generalizados (MLG) poniendo a prueba hipótesis sobre las relaciones entre el jaguar y su hábitat. Utilizamos los MLG en dos dimensiones (condiciones del paisaje y presiones humanas directas) para desarrollar un nuevo modelo de hábitat con aplicaciones directas al manejo de la especie. El monitoreo participativo aportó 982 registros a lo largo de >90.000 km2 en el área central del BAAP. El ENFA determinó que <10% del área analizada aún sostenía hábitat para el jaguar, mientras que el puma demostró ser más tolerante con un 40% más de hábitat disponible. Los MLG destacaron que la presencia del jaguar está determinada por las condiciones del bosque nativo, su historia de fragmentación, usos de la tierra circundantes, accesibilidad para humanos, población rural y nivel de protección. El modelo de dos dimensiones resultante permitió identificar 20.670 km2Puma concolor). Usamos el modelo de hábitat resultante para generar pseudoausencias para aplicar modelos lineales generalizados (MLG) poniendo a prueba hipótesis sobre las relaciones entre el jaguar y su hábitat. Utilizamos los MLG en dos dimensiones (condiciones del paisaje y presiones humanas directas) para desarrollar un nuevo modelo de hábitat con aplicaciones directas al manejo de la especie. El monitoreo participativo aportó 982 registros a lo largo de >90.000 km2 en el área central del BAAP. El ENFA determinó que <10% del área analizada aún sostenía hábitat para el jaguar, mientras que el puma demostró ser más tolerante con un 40% más de hábitat disponible. Los MLG destacaron que la presencia del jaguar está determinada por las condiciones del bosque nativo, su historia de fragmentación, usos de la tierra circundantes, accesibilidad para humanos, población rural y nivel de protección. El modelo de dos dimensiones resultante permitió identificar 20.670 km22 en el área central del BAAP. El ENFA determinó que <10% del área analizada aún sostenía hábitat para el jaguar, mientras que el puma demostró ser más tolerante con un 40% más de hábitat disponible. Los MLG destacaron que la presencia del jaguar está determinada por las condiciones del bosque nativo, su historia de fragmentación, usos de la tierra circundantes, accesibilidad para humanos, población rural y nivel de protección. El modelo de dos dimensiones resultante permitió identificar 20.670 km22 de áreas núcleo para la conservación de la especie (8% del área estudiada), sumado a 32.563 km2 donde el paisaje sostiene buenas condiciones pero existen altas presiones antrópicas. Las diferentes herramientas y enfoques de modelado del hábitat que utilizamos nos permitieron optimizar la información existente para generar conocimiento y aplicaciones para el manejo del jaguar y la ecorregión.2 donde el paisaje sostiene buenas condiciones pero existen altas presiones antrópicas. Las diferentes herramientas y enfoques de modelado del hábitat que utilizamos nos permitieron optimizar la información existente para generar conocimiento y aplicaciones para el manejo del jaguar y la ecorregión.