INVESTIGADORES
BAHR Fernando Anibal
congresos y reuniones científicas
Título:
Escepticismo y materialismo en los textos filosóficos clandestinos
Autor/es:
FERNANDO BAHR
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Workshop; Materialismo y ateísmo en el Siglo de las Luces; 2018
Institución organizadora:
Universidad de Buenos Aires
Resumen:
El título completo original del texto que nos proponemos analizar es ?Respuesta en forma de disertación a un teólogo que pregunta que es lo que quieren decir los escépticos, que buscan la verdad por todos lados tanto en la naturaleza como en los escritos de los filósofos, cuando piensan que la vida y la muerte son la misma cosa. Donde se ve que la vida y la muerte de los minerales, de los metales, de las plantas y de los animales, con todos sus atributos, no son más que maneras de ser de la misma sustancia, a la cual estas modificaciones no agregan ni quitan nada. Por el Sr. Gaultier, médico en Niort?. Curiosamente, esa primera versión es un impreso y en él, además del autor real, figuran también su editor real (Jean Elies, de Niort) y su año real de publicación, 1714. A partir de ella, se elaboraron por lo menos dos versiones manuscritas; una lleva el título de Parité de la vie et de la mort (Ms 1192, Bibliothèque Mazarine); la otra, el de Nouvelle Philosophie Sceptique (Ms. 2239, Bibliothèque de l?Arsenal). Alrededor de 1771, por fin, el texto recibe una segunda impresión, adoptando el nombre de su primera versión manuscrita, esto es, Parité de la vie et de la mort. Para empezar, una pregunta que cabe hacerse es ¿de dónde proviene este último título y por qué se vincula con la historia del escepticismo? La respuesta se encuentra en una frase que Diógenes Laercio atribuye a Tales de Mileto pero que la tradición posterior, seguramente a partir de los Sermones de Estobeo, refirió a Pirrón de Elis, a saber, que no importaba más vivir que morir o morir que vivir. Con ella se quería evocar, seguramente, la famosa adiaphoria ?indiferencia? de Pirrón, es decir, el estado de equilibrio entre el placer y el displacer, la atracción y la repulsión, en que el padre legendario del escepticismo, dicen, tendía a mantenerse. Ahora bien, el ejemplo de Pirrón se limitaba a ser, en todo caso, una consigna moral. En el texto clandestino, en cambio, esa consigna ?como ya hemos visto a partir del subtítulo citado? se modifica radicalmente, transformándose en posición metafísica, posición que el autor reafirma en la primera página