INVESTIGADORES
OLIVERI Maria Beatriz
congresos y reuniones científicas
Título:
Vitamina D y Obesidad
Autor/es:
B OLIVERI
Lugar:
Buenos Aires
Reunión:
Congreso; VIICongreso de Enfermedades del Metabolismo Oseo y Mineral del Mercosur; 2010
Institución organizadora:
SAO
Resumen:
La hipovitaminosis D se halla ampliamente distribuida en todos los estratos etarios y en el mundo. En la Argentina se han comprobado niveles de insuficiencia de vitamina D en neonatos, embarazadas, mujeres postmenopáusicas y ancianos ambulatorios e institucionalizados en diferentes áreas del país. La hipovitaminosis D se asocia con alteraciones del sistema mineral y músculo-esquelético como  hiperparatiroidismo secundario, disminución de la masa ósea, debilidad muscular, mayor número de caídas  e incidencia de fracturas osteoporóticas en adultos mayores.  También se la ha  asociado con varias condiciones médicas como cáncer, diabetes, hipertensión, sindrome metabólico y enfermedades inmunológicas. Si bien todavía existe controversia sobre los niveles óptimos de 25OHD (marcador del estado nutricional de vitamina D) se consideran mayores de 30-40 ng /ml.   Se ha reportado una alta prevalencia de niveles inadecuados de vitamina  D en sujetos obesos, tanto en adultos como en niños y adolescentes.  En sujetos con sobrepeso y  obesidad (mórbida y no mórbida) fue observada una correlación  inversa entre los niveles de 25OHD y el índice de masa corporal (IMC),  circunferencia de cintura, pliegues cutáneos y tejido adiposo evaluado por DXA, impedancia bioeléctrica y tomografía computada(TC).   Esta deficiencia sería multifactorial y los hallazgos varían entre los diferentes estudios. Entre las causas se puede nombrar:   1) Factores indirectos: Relación de la hipovitaminosis D con menor exposición solar debido a hábitos de menor actividad física al aire libre y uso de vestimentas con menos áreas descubiertas. 2) Relación con características bioquímicas (liposolubilidad) de la vitamina D: al ser la vitamina D liposoluble, los sujetos obesos  presentarían  un mayor clearance de vitamina D, ya que sería captada y almacenada por el tejido adiposo, con menor biodisponibilidad para  vitamina D circulante y /o su conversión a metabolitos activos.   Cuanto mayor es la cantidad de tejido adiposo (ya sea evaluado indirectamente por IMC, circunferencia de cintura, pliegues cutáneos o más directamente por otros métodos como DXA, TC ), mayor sería el secuestro de vitamina D por el tejido adiposo. Estudios efectuados midiendo los niveles circulantes de D3  y su concentración en tejido graso de pacientes que realizaron un by-pass gástrico, encontraron entre ambos una correlación positiva, avalando el concepto que el tejido graso es un sitio de “almacenamiento  o secuestro de vitamina D”.  Este concepto también es apoyado por los estudios de exposición a la radiación UV en sujetos con IMC normal y en obesos, que observan un aumento de D3 57% menor en obesos que en controles. 3) Relación con diferentes compartimentos  de tejido adiposo: En un subgrupo de la población del  estudio Framinghan (3ª generación), se realizaron mediciones de tejido adiposo abdominal visceral (VAT) y subcutáneo (SAT) por tomografía computada.  Este grupo presentaba 22% de obesos (IMC ≥ 30),  35% con sobrepeso (IMC ≥ 25 y <30) y 43% IMC < 25.   Se encontró que los niveles de 25OHD menores a 20 ng/ml eran más frecuentes en aquellos con mayor SAT y VAT, con una prevalencia que triplicaba la de aquellos que presentaban baja VAT y SAT.  Además la prevalencia de insuficiencia de vitamina D iba en aumento a medida que aumentaban los tercilos de VAT, no sólo en aquellos con sobrepeso y obesidad sino incluso en sujetos con IMC normal. Por lo tanto la grasa visceral evaluada por TC estaría inversamente relacionada a los niveles de 25OHD, incluso en individuos con IMC normal.    Otra visión del problema es la posibilidad que los niveles bajos de vitamina D favorezcan la obesidad. La hipovitaminosis D promueve aumentos de hormona paratiroidea, con subsecuente aumento de entrada  de calcio a las células adiposas, favoreciendo la lipogénesis.  Paralelamente los niveles inadecuados de  vitamina D se han asociado a síndrome metabólico y resistencia a la insulina, dos alteraciones de alta prevalencia en pacientes  obesos. Estudios experimentales han mostrado que la vitamina D puede estimular la secreción pancreática, aunque, en humanos, los resultados sobre la secreción de insulina por la administración de vitamina D, no han sido concluyentes.   Como conclusión la prevalencia de niveles inadecuados de vitamina D en sobrepeso y obesos  y su asociación con comorbilidades es mayor que en sujetos con  normopeso.  Su fisiopatogenia sería multifactorial y los niveles deben ser monitoreados para indicar una adecuada suplementación que puede requerir dosis mayores que en sujetos con IMC normal.