INVESTIGADORES
LUQUE Enrique Hugo
congresos y reuniones científicas
Título:
La exposición prenatal al xenoestrógeno Bisfenol A: ¿Modula la acción de un carcinógeno químico sobre la glándula mamaria?
Autor/es:
DURANDO M; KASS L; PIVA J; LUQUE EH; MUÑOZ DE TORO M
Lugar:
Mar del Plata, Argentina
Reunión:
Congreso; XLIX Reunión Científica de SAIC; 2004
Institución organizadora:
SAIC
Resumen:
El sostenido incremento en la incidencia de cáncer de mama coincide con la creciente utilización de químicos estrogénicos que contaminan el medio ambiente. Estudios epidemiológicos, sin embargo, no han logrado demostrar una indiscutible relación causa-efecto. Nuestro objetivo fue investigar si la exposición prenatal a bisfenol A (BPA), xenoestrógeno usado en la manufactura de plásticos, resinas epoxi y selladores dentales, modifica la sensibilidad de la glándula mamaria al carcinógeno químico, nitrosometilurea (NMU). Ratas Wistar preñadas recibieron (desde día 8 hasta el parto) BPA (25 μg/kg/día) o vehículo (V). Las crías hembras fueron tratadas, a los 50 días (50d) de edad, con 25 mg/kg de NMU (V+25NMU; BPA+25NMU). Otro grupo de crías, a los 50d recibió 50 mg/kg de NMU (V+50NMU) y se usaron como control positivo. En la glándula mamaria se evaluó actividad proliferativa y apoptosis, infiltración de mastocitos, proliferaciones intraductales (PIDs) a los 110d y 180d e incidencia tumoral a los 180d. La mayor sensibilidad al NMU, de los animales expuestos prenatalmente a BPA, se evidenció por el aumento de: a) la relación proliferación/apoptosis en parénquima y estroma a los 110d, b) PIDs a los 110d (V+25NMU 6,5±1,2 vs BPA+25NMU 13,6±2,9) y 180d (V+25NMU 15,7±1,2 vs BPA+25NMU 34,8±4,0), c) la infiltración de mastocitos a los 110d (V+25NMU 0,4±0,02 vs BPA+25NMU 0,6±0,15), d) la incidencia de tumores a los 180d [V+25NMU 0% (0/11) vs BPA+25NMU 20% (3/15)]. En el control positivo (V+50NMU), 8/10 animales desarrollaron tumores mamarios a los 180d. La exposición prenatal a BPA, en concentraciones semejantes a las descriptas en el ambiente, aumenta la sensibilidad de la glándula mamaria a un carcinógeno químico promoviendo el mayor desarrollo de lesiones neoplásicas.