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La respuesta predominante de las plantas a déficits hídricos moderados consiste en la disminución del crecimiento foliar. Los déficits hídricos pueden ocurrir en distintos momentos del desarrollo de las hojas. La mayor parte de los estudios se han ocupado principalmente del efecto del estrés sobre la tasa de crecimiento, sin embargo no existe demasiada información sobre la duración. El objetivo del presente trabajo fue analizar la duración de la expansión foliar en plantas sometidas a déficits hídricos aplicados en diferentes momentos de su desarrollo. Dos líneas de girasol contrastantes en su respuesta al crecimiento foliar ante estrés hídrico (HAR2 y HA64) fueron sembradas en macetas y mantenidas posteriormente en invernáculo. Se aplicaron los siguientes tratamientos: 1) estrés hídrico temprano de intensidad moderada y constante (EH1), 2) reirrigación de un subgrupo de 1) (RI), 3) estrés tardío de intensidad moderada y constante (EH2) y 4) testigo (T). El crecimiento de las hojas 2, 4, 6, 8, 10 y 12 fue evaluado a partir de mediciones no destructivas (largo de hojas mayor a 4 cm y ancho mayor a 1.5 cm), cada 2 días. En HAR2, ambos estreses aumentaron la duración de la expansión foliar. EH1 afectó principalmente a partir de la hoja 6, mientras que EH2 a partir de la hoja 8. En ambos casos, el estrés afectó a las hojas que se encontraban en la fase de crecimiento exponencial. La duración de las hojas en RI, disminuyó, en general y alcanzó un valor intermedio entre las hojas de T y EH1. En HA64, se observaron respuestas similares, aunque de menor magnitud que en HAR2 (11 vs 27 % EH1, 6 vs 19 % EH2, respectivamente, promedio de hojas en comparación con T). Nuestros resultados muestran que un estrés aumenta la duración de aquellas hojas que se encuentran en su fase exponencial de crecimiento. Las condiciones posteriores permitirían modular este efecto pero no revertirlo completamente.

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