CIIPME   05517
CENTRO INTERDISCIPLINARIO DE INVESTIGACIONES EN PSICOLOGIA MATEMATICA Y EXPERIMENTAL DR. HORACIO J.A RIMOLDI
Unidad Ejecutora - UE
libros
Título:
Nacer y Pensar Aplicación
Autor/es:
OIBERMAN A.,BAGNASCO M., GONZALEZ G.,MANSILLA M., COLL MARTINOIA J.,ALONSO V., VIENNY C., RIBOLDI M., BEDACARRATZ R., NEGRO C., ORGE D., PELLEGRINO V., MORENO M., RODRIGUEZ G., FERRARI A., LEDESMA A., SCHAPIRA I., HALLER L., HOURCADE M:,PERUZZO C., MUZZIO
Editorial:
Ediciones Ciipme- Conicet
Referencias:
Lugar: Buenos Aires; Año: 2006 p. 345
ISSN:
978-950-692-074-6
Resumen:
  Prólogo Disponer de instrumentos para la evaluación de diferentes aspectos del desarrollo motor y cognitivo desde los primeros meses de vida del niño, es de vital importancia para todas las escuelas psicológicas de la primera infancia. Desde hace muchísimos años se utilizan los baby tests, que marcaron un hito en la medición del desarrollo del niño pequeño. Estos evalúan el desarrollo psicomotor en cuatro áreas: motricidad, coordinación, lenguaje y social. Si bien estas escalas de evaluación han llenado un importante vacío en el diagnóstico, el tratamiento y la prevención en salud mental infantil,  las  mismas  no  contemplan adecuadamente el desarrollo cognoscitivo de niños muy pequeños. A partir de los años 60, surge  interés por la elaboración de instrumentos que permitan verificar las observaciones que Piaget describiera en sus estudios sobre el desarrollo intelectual temprano. Es sabido que Piaget tiene una concepción constructivista del desarrollo cognoscitivo del ser humano. Dentro de esa perspectiva, el período que va del nacimiento hasta la adquisición del lenguaje, es el de la construcción de la inteligencia en un plano sensorio-motor a través de las acciones y de los sentidos. En sus libros Psicología de la inteligencia (1973) y La construcción de lo real en el niño (1963), Piaget expuso su teoría del período de la inteligencia sensorio-motriz, de la siguiente manera: "Asistimos a una organización de los movimientos y de los desplazamientos que, centrados en principio sobre el mismo cuerpo, se descentran paulatinamente y llegan a un espacio en el cual el niño se sitúa él mismo como un elemento entre los otros (como un sistema de objetos permanentes que comprende su cuerpo del mismo modo que los otros). Vemos allí, en pequeño y en el plano práctico, exactamente el mismo proceso de descentralización progresiva que encontraremos seguidamente en el nivel representativo en términos de operaciones mentales y no simplemente de acciones" (Piaget, 1973, Pág. 135). Por lo tanto, para Piaget y sus colaboradores, la inteligencia es esencialmente operativa. Su función es actuar sobre los materiales que a ella le llegan, movilizarlos y transformarlos. Por ello, para conocer los objetos es necesario descomponerlos y recomponerlos. Se distinguen dos grandes períodos en el desarrollo de la inteligencia: antes y después de la constitución de la función simbólica (o semiótica), la cual aparece entre los 16 y los 20 meses. El primer período concierne a lo que Piaget denomina la inteligencia sensorio-motriz. Dentro de este período llamado sensorio-motor, el niño de a poco comienza a relacionar objetos y actos, distinguiendo los medios de los fines, dándose cuenta de los resultados obtenidos y utilizando hacia el fin de ese período, procesos de inferencia.  Estadíos de la Inteligencia sensorio-motriz 1ª mes. Estadío I: es el de las reacciones arcaicas o reflejos, que, a pesar de la perfección del montaje hereditario, necesita una cierta ejercitación para  adaptarse. 2 a 6 meses. Estadío II: la utilización progresiva de los reflejos conduce a los primeros hábitos. 6 a 8 meses. Estadío III: ya el niño percibe una relación entre lo que hace con sus manos y aquello que visualiza. Su interés recae en los resultados. 9 a 12 meses. Estadío IV: el niño distingue medios de fines. El niño puede prever lo que va a suceder sin llegar a la deducción.    13 a 16 meses. Estadío V: se produce el inicio de conductas activas de experimentación y el descubrimiento de medios nuevos. Se producen conductas innovadoras e imprevistas. 17 en adelante: Estadío VI: está caracterizado por la combinación mental  de esquemas con posibilidad  de resolución de ciertos problemas por deducción, invención de medios nuevos  y comienzo de  evocaciones representativas. En los últimos 40 años se  desarrollaron diversos trabajos con el objetivo  de verificar las  hipótesis piagetianas. Entre los antecedentes más destacados se encuentra el realizado por Thèrese Gouin-Decarie (1967) en la Universidad de Montreal en 1961, quien en el contexto de una investigación sobre la afectividad en el niño, se interesó por las etapas del descubrimiento de la permanencia del objeto. Escalona y Corman (1967) presentaron, en el Instituto Einstein (EE.UU.), una escala de verificación de las etapas del desarrollo sensorio-motor en el marco de un programa de investigaciones sobre las funciones sensorio-motrices y las funciones generales del yo. Por otra parte, Woodward y Stern (1963) verificaron la sucesión de los estadíos descriptos por Piaget, en 247 sujetos de 2 a 18 meses. Casati y Lezine (1968) diseñaron una escala, que fue la primera tentativa en Francia, elaborando una serie de pruebas estandarizadas, basadas en las observaciones experimentales y controlables de Piaget sobre ese período. Esta escala prioriza los aspectos más importantes de las adaptaciones sensorio-motrices. Las  pruebas elegidas en la escala toman en cuenta los siguientes temas: búsqueda del objeto desaparecido, utilización de intermediarios, exploración de objetos y combinación de objetos. La prueba fue estandarizada con una población de 305 sujetos de 6 meses a 2 años (170 niñas y 135 varones). Haeussler (1981) elaboró en Chile el primer instrumento de evaluación del desarrollo intelectual para niños menores de 2 años realizado en  América Latina.  Su  base  teórica  es  la concepción de Piaget del desarrollo de la inteligencia en el niño. La revisión de las pruebas antes mencionadas y la necesidad de contar con un instrumento estandarizado para el diagnóstico del desarrollo intelectual de bebés argentinos llevó aelaborar  la Escala Argentina de Inteligencia sensorio-motriz  para niños de 6 a 24 meses de edad. Escala Argentina de Inteligencia sensorio-motriz  Objetivos  de  su  construcción La hipótesis de este trabajo fue considerar que los estadíos sensorio-motrices, descriptos por Piaget -a través de observaciones clínicas- y validados con la Escala de  Etapas de Inteligencia sensorio-motriz por   Casati y Lezine (1968) en Francia,  pueden ser especificados y estandarizados en una escala de inteligencia para una población de bebés argentinos. Los objetivos fueron: a.- Evaluar la inteligencia sensorio-motriz de bebés argentinos a los fines de obtener valores estándares de referencia de la población argentina.  b.- Profundizar en el conocimiento de los procesos intelectuales en niños de muy temprana edad (6 a 24 meses), específicamente en lo relacionado con los factores de motivación que influyen en el proceso cognitivo, de nuestra población. c.- Contribuir con un instrumento útil y eficaz al área de la salud para el diagnóstico del desarrollo intelectual de bebés argentinos de 6 a 24 meses de edad, para la predicción temprana de habilidades futuras o trastornos en el área cognitiva. La EAIS fue construida entre los años 1998 y 2002. Se obtuvo  una muestra de 323 bebés que pertenecían a diferentes estratos sociales de la ciudad de Buenos Aires y del conurbano.  La EAIS evalúa los procesos cognoscitivos del niño  en forma cualitativa y cuantitativa: importa tanto el logro final alcanzado como el modo con el cual  intenta solucionar la  situación propuesta (Oiberman A.; Mansilla M.; Orellana L., 2002). Esta Escala permite localizar a cada niño  en un estadio final o resumen de acuerdo con los resultados obtenidos en todas las pruebas administradas. Se consideró como una medida resumen del nivel de inteligencia del niño, a la mediana de los estadíos alcanzados en todas las pruebas administradas, llamada Estadío Mediano. La aplicación de la EAIS se inicia con el estadío III, cuando el niño ha adquirido una  coordinación suficiente de la visión y de la prensión y con el dominio de la posición  sentada, y finaliza con el estadío VI. Las pruebas elegidas para la Escala consideran los siguientes temas: *          exploración del objeto, *          búsqueda del objeto desaparecido, *          utilización de intermediarios y *          combinación de objetos. Los datos obtenidos a partir de esta muestra de bebés para cada prueba y para la medida resumen se incluyen en tablas. El objetivo deestas tablas es presentar una estimación del rango en el cual sería esperable encontrar a niños de 6 a 24 meses de edad, provenientes de una población similar a la de los niños de esta muestra. Población, Material y Métodos: El test  estudia los estadíos de la inteligencia sensorio-motriz de 6 a 24 meses. Consta de 45 pruebas aplicadas en cuatro tipos de situaciones diferentes: Cada ítem define el estadío en su inicio, transcurso y fin en que se encuentra el niño en esa serie. -          La serie exploración de objetos contiene 7 ítems. -          La serie búsqueda del objeto desaparecido consta de 8 ítems. -          La serie de intermediarios está compuesta por tres sub-series diferentes: cinta contiene 5 ítems; soporte está formado por 8 ítems e instrumento, por 7 ítems. -          Por último, la serie combinación de objetos contiene dos sub- series: tubo-rastrillo y tubo-cadena, ambas constan de 5 ítems cada una. Materiales El material requerido para aplicar el instrumento, siempre bajo la estricta supervisión de un adulto, es el siguiente: - Una caja con  los siguientes elementos didácticos: 1 espejo plástico pequeño, 1 pantalla de cartón, 5 paños de tela fina, 2 argollas de madera, cintas, 1 disco de madera con pivote, 1 rastrillo de madera, 1 muñeca de trapo, 2 muñequitos de madera, 1 tubo de acrílico, 2 autos de madera, 1 cajita símil fósforo, 1 palito y 2 cubos  de madera. - Manual de Administración de la EAIS. - Hojas de registro (Protocolo). Población La muestra estuvo conformada por 323 bebés de 6 a 24 meses del Hospital Materno-Infantil Ana Goitía, del Plan de Salud del Hospital Italiano de Buenos Aires y  de dos jardines infantiles  del Gobierno de la ciudad de Buenos Aires. La población del Hospital Ana Goitía y de los jardines infantiles es fundamentalmente de clase media y media baja, mientras que los niños del Hospital Italiano pertenecían al nivel alto y medio. Los criterios de inclusión fueron: edad gestacional a  partir de 37 semanas, sin traumatismos de parto o posparto, y coeficiente de desarrollo (CD) mayor o igual a .85 en la escala de la EEDP (Rodríguez, Arancibia & Undurraga, 1979). La escala fue administrada durante losaños 1999, 2000 y 2001 a bebés sanos de 6 meses y 1 día a 24 meses de edad inclusive. Luego de una breve explicación sobre el objetivo del estudio, los padres eran invitados a autorizar la participación del niño. La administración de la Escala de Etapas de Inteligencia fue realizada una vez a cada niño. En los hospitales la tarea se realizó en los consultorios pediátricos en presencia de la madre, eventualmente del padre, mientras que en los Jardines Infantiles la escala se administró en lugares dispuestos por la institución, en presencia de la maestra de sala. La prueba se aplicaba solamente si el niño estaba en condiciones adecuadas de salud, alimentación y sueño (sin fiebre, irritación, hambre, fatiga, etc.), es decir si podía cooperar e interesarse por las tareas propuestas. La administración fue siempre individual. El niño se encontraba en presencia de algún familiar muy cercano (madre, padre, maestra, etc.), dicha administración variaba según la edad del bebé, menos tiempo en bebés de hasta 14 meses para quienes la prueba dura aproximadamente 10 minutos, y mayor tiempo con niños más grandes, con los cuales la prueba puede durar hasta 20 minutos. El objetivo inicial fue contar con 20 bebés de cada mes de edad. Este objetivo pudo ser cumplido y superado con los niños de 6 a 13 meses. Sin embargo, la incorporación al estudio de niños de 14 a 23 meses resultó más difícil. Por esta razón el análisis de los datos se realizó agrupando los niños según las siguientes edades: 14 - 15 meses, 16 - 17 meses, 18 - 19 meses, 20 - 21 meses y 22 - 23 meses y 24 meses. Análisis Estadístico: Los datos se procesaron con el programa STATA. Resultados  Con esta escala fue posible calificar a cada niño de acuerdo con los resultados obtenidos a partir de todas las pruebas administradas en un estadío final o resumen. Se comprobó  que el bebé va alcanzando  estadios superiores  a medida que aumenta su edad.  Se consideró el siguiente criterio: determinar en cada serie el estadío más alto alcanzado, ya que un niño está en un determinado estadío, cuando aprueba al menos un ítem de ese estadío. Luego se analizan cuidadosamente sus respuestas, serie por serie, y a partir de allí se determinará el estadío en que se encuentra. Esta metodología permitió la construcción de una medida resumen de todas las pruebas, a la que se denominó estadío resumen.  Por lo tanto, resulta más razonable utilizar una medida resumen que señale una idea promedio del desenvolvimiento del bebé a lo largo de todas las pruebas administradas. En consecuencia, se consideró como una medida resumen del nivel de inteligencia del niño, a la mediana de los estadíos alcanzados en todas las pruebas administradas que denominaremos Estadío Mediano. Los resultados obtenidos de esta muestra poblacional permitenconcluir que a los 6 meses, los niños se encuentran finalizando el estadío III o iniciando el estadío IV.  A partir de los 7 meses se ubican en el inicio del estadío IV. A los 8 meses se localizan en el IV estadío. A los 9, 10 y 11 meses la mediana resumen expresa una meseta en el desarrollo, localizando a los bebés a partir del fin del IV estadío.  A los 12 y 13 meses de edad los bebés se localizan en su mayoría en el inicio del V estadío. A partir de los 14 y hasta los 17 meses los niños alcanzan el fin del V estadío. A los 18 - 19 meses, la mediana resumen indica que los niños en su mayoría, se localizan entre el fin del V estadío y el inicio del VI. Recién a partir de los 20 y hasta los 23 meses se observa una ubicación neta de la mayoría de los bebés en el inicio del VI y los bebés de 24 meses se encuentran atravesando el VI estadío. En síntesis, a medida que aumenta la edad hay una mayor proporción de niños que alcanzan estadíos más altos en la prueba de inteligencia. Se observan algunas edades en las que parece haber saltos cualitativos en el estadío logrado. Es a partir de los 17 meses que algunos niños logran el comienzo del estadío VI,  siendo excepcional observar el final del estadío VI antes de los 22 meses. Estimación del rango esperable para cada edad entre 6 y 24 meses: Percentiles Los datos obtenidos a partir de esta muestra de bebés para cada prueba y para la medida resumen se incluyen en tablas. El objetivo de estas tablas es presentar una estimación del rango en el cual sería esperable encontrar a niños de 6 a 24 meses de edad, provenientes de una población similar a la de los niños de esta muestra y establecer un parámetro de normalidad o deficiencia en torno al desarrollo cognitivo. Estimación del rango según edad La tabla presenta los datos correspondientes a cada edad a través de 7 estadíos. El mínimo estadío se registra como P(min), los estadíos correspondientes al percentil 10 % (P 10), al percentil 25 % (P 25), al percentil 50 % o mediana (P 50), al percentil 75 % (P 75) y al máximo estadío observado para la edad P(max). Dado  que la  EAIS  resulta  una herramienta eficaz para la evaluación del desarrollo cognoscitivo de bebés, su utilización  en el diagnóstico de bebés en diferentes circunstancias, posibilita  conocer  su desarrollo  cognoscitivo  y la predicción temprana de habilidades futuras o trastornos en el área cognitiva. Nuestro objetivo es  exponer el trabajo que  diferentes  profesionales han  realizado utilizando como  herramienta la EAIS. Algunos de ellos correspondieron a monografías que realizaron en el marco del curso de entrenamiento que iniciamos en el CIIPME a partir del 2004. El curso forma parte del STAN/Resolución 1006/2 del CONICET. Otros fueron trabajos que seleccionamos considerando que su divulgación permitiría enriquecer el campo del desarrollo cognoscitivo de la primera infancia. Alicia Oiberman