CIQUIBIC   05472
CENTRO DE INVESTIGACIONES EN QUIMICA BIOLOGICA DE CORDOBA
Unidad Ejecutora - UE
capítulos de libros
Título:
Bioquímica de carbohidrados y glicobiología
Autor/es:
D'ALESSIO C.; DANIOTTI J.L.
Libro:
Estado y perspectivas de las ciencias exactas, físicas y naturales en la Argentina
Editorial:
Academia Nacional de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales; Academia Nacional de Ciencias
Referencias:
Lugar: Buenos Aires, Córdoba; Año: 2015; p. 485 - 488
Resumen:
El desarrollo sostenido de la investigación bioquímica en el paísestuvo sustentado, en gran medida, por un sólido y continuo crecimiento dela investigación en bioquímica de lípidos y carbohidratos, lo cual perduraen la actualidad en numerosos y reconocidos grupos de investigación.Particularmente, el desarrollo en la Argentina de la investigación bioquímicaen el área de carbohidratos-glicobiología ha sido sostenido durante los últimossetenta años. Actualmente, nuestro país mantiene un claro liderazgo regional enesta disciplina científica, contribuyendo al conocimiento global con significativos hallazgos. La contribución directa o indirecta del Dr. B. Houssay al desarrollo en el país de la Glicobiología, en general, y de la Bioquímica de Carbohidratos, en particular, es ineludible. El trabajo del Dr. Houssay en relación al rol de la glándula pituitaria sobre el metabolismo de carbohidratos le significo el Premio Nobel en el año 1947, compartido con los Dres. Carl y Gerty Cori (USA). En 1933, Luis Federico Leloir conoció al Dr. Bernardo Houssay, quien dirigió su tesis doctoral acerca de las glándulas suprarrenales y el metabolismo de los hidratos de carbono. Por iniciativa del Dr. Houssay, en el año 1947 se creó la Fundación Campomar, siendo el Dr. Leloir su primer Director. Las investigaciones llevadas a cabo junto a los doctores Carlos Eugenio Cardini, Ranwell Caputto, Raúl Trucco, Enrico Cabib, y el entonces becario Alejandro Paladini, dieron como resultado, entre otros importantes descubrimientos, el aislamiento y caracterización de la glucosa 1,6 difosfato y de la uridinadifosfatoglucosa. Estos hallazgos sobre la activación de los azúcares formando compuestos denominados genéricamente nucleótido-azúcares puso en evidencia caminos metabólicos no conocidos por entonces y se transformó en un concepto básico para posteriores investigaciones en todo el mundo, lo que le valió al Dr. Leloir la concesión en 1970 del Premio Nobel de Química.