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Las células madre tienen la capacidad de dividirse y diferenciarse en células del tejido en que se encuentran. Si el equilibrio dinámico entre proliferación y diferenciación de las células madre no es preciso, se puede generar una enfermedad proliferativa o pérdida de la funcionalidad del ́organo. En varios sistemas la decisión del destino celular (¿diferenciarse o mantener la identidad de célula madre?) es definida por la inhibición mutua entre células vecinas a través de la vía de señalización de Notch. Usualmente, los modelos matemáticos para la interacción Notch-Delta resultan invariablemente en un quiebre de simetría entre estados de señalización, es decir, a partir de dos células madre siempre se obtienen destinos diferentes: una de ellas mantiene la identidad de célula madre y la otra se diferencia. Si bien el quiebre de simetría es un mecanismo que explica la diferenciación celular, este no es consistente con resultados experimentales para el epitelio del intestino de la Drosophila melanogaster (la mosca de la fruta), que muestran que existe diversidad en los destinos posibles de pares decélulas. En esta presentación mostramos un ejemplo muy productivo de la interacción entre físicos y biólogos, con un ida y vuelta de modelos matemáticos y experimentos.