Secuencias clásticas intereruptivas en el ambiente de sin-rift de la Cuenca Neuquina, Argentina

BILMES, A.; FRANZESE, J.R.; VEIGA, G.D.

S.C. de Bariloche

Congreso; IV Congreso Latinoamericano de Sedimentología y XI Reunión Argentina de Sedimentología; 2006

Asociación Argentina de Sedimentología

La Cuenca Neuquina es un depocentro ubicado en el centro oeste de Argentina desarrollado entre el Triásico tardío y el Cenozoico temprano. Durante el período extensional inicial (Triásico superior-Jurásico inferior) se produjeron un conjunto de cubetas desarrolladas en un ambiente volcánico, cuyo relleno fue agrupado dentro del ciclo Precuyano (Gulisano et al., 1984). Si bien esta unidad se compone mayoritariamente de depósitos volcánicos y volcaniclásticos, se registran en forma subordinada niveles con facies clásticas. En este trabajo se presenta una caracterización sedimentológica detallada de uno de estos niveles y se analiza su significado dentro del contexto del relleno de sin-rift.Los depósitos objeto de estudio se ubican en la Sierra de Chacaico, a 70 km al oeste de la ciudad de Zapala. La secuencia de sin-rift en esta localidad, está integrada por la Formación Lapa, de edad Triásico Superior-Jurásico Inferior. La Formación Lapa está compuesta por sedimentitas volcaniclásticas, cuerpos lávicos de composiciones variables y, en forma subordinada, sedimentitas epiclásticas. Existen al menos tres niveles estratigráficos clásticos levemente lenticulares que presentan límites netos con las unidades supra e infrayacentes, con espesores máximos de 40 m y extensiones laterales de no más de 500 m.Con el objetivo de conocer los procesos que dieron lugar a la formación de estas secuencias clásticas y el modelo de acumulación, se realizó un estudio sedimentológico detallado de uno de esos niveles. Se trata de un cuerpo de base cóncava y techo plano ubicado por encima de depósitos volcaniclásticos más finos. Su extensión lateral es de aproximadamente 150 m y tiene una potencia máxima de 39 m. Hacia el tope limita con depósitos de flujos piroclásticos. Dentro del cuerpo clástico predominan las facies gruesas compuestas casi exclusivamente por conglomerados finos y medios, mal seleccionados, con matriz sostén arenosa. También aparecen niveles aislados y reducidos con textura clasto sostén. Estas facies son generalmente masivas y presentan dos tipos de geometrías: lenticular con base cóncava y techo plano, y lenticular con base plana y techo convexo. Las primeras pueden presentar además estratificación horizontal difusa o, en forma subordinada, estratificación entrecruzada planar. En todos los casos los depósitos son polimícticos con mayor proporción de clastos líticos volcánicos que de cuarzo y feldespato. Se encuentran además clastos líticos plutónicos y sedimentarios. Las facies finas están compuestas por areniscas líticas con escasa matriz pelítica. Estos cuerpos se presentan con geometría tabular a levemente lenticular, con gradación inversa-normal y normal, laminación horizontal y grietas de desecación. En forma subordinada se registran cuerpos lenticulares con óndulas y estratificación entrecruzada planar. Los depósitos también son polimícticos y los clastos líticos dominan por sobre los de cuarzo y feldespato. El arreglo vertical de las facies, de base a techo es granodecreciente hasta la mitad del cuerpo, pasando luego en forma neta a facies gruesas que mantienen la granulometría constante hasta el tope de este cuerpo clástico.A partir de las características anteriormente descriptas se concluye que los depósitos gruesos del nivel clástico estudiado fueron el resultado de la acumulación generada por flujos hiperconcentrados y flujos de detritos que predominaron por sobre los flujos diluidos. Estos últimos están muy restringidos en el registro de la secuencia y aparecen con facies típicas de barras. Las facies finas, en cambio, se habrían acumulado a partir de flujos gravitatorios arenosos, crecidas en manto proximales y distales y en menor medida de flujos diluidos que generaron pequeños canales aislados. El conjunto de estos procesos implica la existencia de un paleoambiente aluvial proximal que pasa transicionalmente a facies distales, interrumpidas en forma abrupta por depósitos proximales. La ubicación del cuerpo clástico entre dos niveles volcánicos, las características polimícticas de las facies (que involucran además de los clastos volcánicos a clastos ígneos del basamento y a clastos sedimentarios) y los mecanismos de acumulación descriptos, sugieren que el nivel estudiado no habría estado vinculado directamente con los procesos volcánicos que dominan la estratigrafía de sin-rift. Este nivel clástico representaría una unidad intereruptiva que rellenó una incisión labrada con anterioridad sobre depósitos sineruptivos.