Ganadería en islas: disponibilidad de forraje y sustentabilidad

MESA, LETICIA; GUTIÉRREZ, HUGO; MONTALTO, LUCIANA; SEIMANDI, GISELA; SÁNCHEZ, ROCÍO

Congreso; Argentina y Ambiente 2017; 2017

En Argentina, la expansión de la frontera agrícola generó el desplazamiento de la actividad ganadera hacia sitios considerados marginales para la producción de granos como son los humedales1. En islas del río Paraná Medio, las extensas superficies con oferta de forraje para el ganado, sumado a la presencia de agua de buena aptitud para el consumo animal, determinan que esta zona posea un alto potencial para el engorde de ganado. El incremento del número de cabezas de ganado en esta zona vuelve imperioso su estudio, en vistas a un desarrollo sustentable de esta actividad. Los objetivos de este trabajo fueron determinar la estructura y composición de la vegetación terrestre, palustre y acuática de lagunas de la llanura aluvial del Río Paraná Medio con manejo rotacional del ganado, analizar la variabilidad en cobertura y biomasa de la vegetación forrajera antes de la presencia de ganado y luego de su retirada, y entre lagunas con y sin ganado. Los muestreos fueron realizados en tres lagunas aisladas de la llanura aluvial del Río Paraná Medio, dos con manejo rotacional del ganado (L1, L3) y una sin ganado durante el período de muestreo (L2). Para caracterizar la cobertura y biomasa de vegetación terrestre, palustre y acuática, se utilizaron 4 cuadrados de 4 m2 y 2 cuadrados de 0.25 m2 dispuestos al azar en cada estrato. Un total de 78 unidades taxonómicas fueron registradas en el estrato terrestre, 39 en el estrato palustre, y 10 en el acuático. Las unidades taxonómicas dominantes tanto en cobertura como biomasa fueron Cynodon dactylon (70-100%), Ludwigia peploides (60-60%), Echinochloa sp. (40-60%) y Polygonum punctatum (60-90%). Por otra parte, la riqueza fue mayor en L2 en comparación con las otras lagunas. La cobertura y biomasa de vegetación forrajera fue mayor en las lagunas con ganado (>60%) en comparación con L2 (40-50%). La biomasa de la vegetación forrajera en el estrato terrestre y palustre disminuyó 20-40% luego de la retirada del ganado, mientras que la cobertura no varió significativamente. La altura de esta vegetación fue considerablemente mayor antes de la introducción del ganado en comparación al periodo posterior al impacto vacuno. En conclusión, los efectos directos e indirectos del ganado tendrían una importancia fundamental en la estructura de la vegetación de humedales, determinando la importancia de las forrajeras en estos ambientes. El manejo rotacional del ganado, sumado a la alta capacidad de regeneración de la vegetación favorecida por las altas temperaturas y humedad del suelo favorecen el desarrollo sustentable de esta práctica.